El mundo moderno y de las redes sociales es un territorio desafiante en muchos sentidos y las mega estrellas que surcan ese espacio lo saben muy bien. Wanda Nara es una de las argentinas con más seguidores en el mundo digital y sabe perfectamente como manejarlas.
Es debido a su gran trayectoria y amplia experiencia en el mundo de las plataformas sociales que Wanda Nara aprobó una decisión para sentar las bases del crecimiento mediático de su familia, especialmente de sus integrantes más recientes.
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Hace algunas horas, la conductora confirmó por medio de su Instagram, que su hija, Francesca, ya tiene su propia cuenta en la red social de la camarita y le dieron la bienvenida a este fascinante mundo con unas sentidas palabras.
"Bienvenida a Instagram Francesca Icardi".
Como muchos saben, las pequeñas hijas de la empresaria y el futbolista ya se habían dejado ver en algunas pasarelas a comienzos de año, cuando desfilaron en Uruguay. Esto habría marcado un antes y un después en sus vidas y las redes pedían cada vez más saber de ellas.
Aparentemente, tras haber deliberado en familia, la famosa y el delantero tomaron la determinación de otorgarle el permiso para que la joven tenga su propia cuenta en la red social de Meta, pues podría ser de mucha ayuda para su crecimiento en el espectáculo, de así quererlo.
Solo algunas horas después de haber sido anunciada, la cuenta de la pequeña ya tenía más de 45.000 seguidores entre los que se hallan Zaira Nara, Kennys Palacios, Nara Icardi, Wanda, Valentino López, entre otros. Un completo éxito para una cuenta que seguramente dará que hablar.
La supervisión de sus padres
Si bien Wanda Nara y Mauro Icardi autorizaron a que su pequeña Francesca tenga Instagram, lo cierto es que, como sucede en estos casos con niños, estas plataformas son administradas por sus progenitores que tienen los permisos necesarios para controlarlo todo.
Como es sabido, internet es un fantástico lugar para obtener información y entretenimiento, pero no todas las personas que surcan la red tienen buenas intenciones. Es por eso que el control por parte de los padres de los menores en las redes es completamente fundamental y obligatorio.