La salud general busca mantener un equilibrio entre todos los aspectos que hacen al organismo, especialmente en aquellos que nos conectan con el mundo que nos rodea. De todos los sentidos, quizá el que más sufre los achaques de la modernidad sea el de la audición, por lo que existen ciertos consejos para cuidarla.
La salud en el aparato auditivo puede verse comprometida por muchos factores, pero el que ocasiona la mayor cantidad de daño es sin lugar a dudas el volumen alto. Para evitar problemas vinculados a este apartado, te brindamos todos los consejos que necesitas.
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Según un estudio por parte de BMJ Global Health, entre 600 y 1300 millones de personas están actualmente en riesgo de perder la audición, no solamente por el uso inapropiado de auriculares, sino por estar sometidos a cargas de decibeles muy altas, en el ámbito doméstico pero también en conciertos.
Si bien muchas franjas etáreas pueden presentar afecciones al aparato auditivo, lo cierto es que los jóvenes son los que menos se cuidan en este sentido. Se calcula que entre 20% y el 30% de las personas entre los 12 y 34 años sobrepasan los niveles aceptables de volumen en sus dispositivos musicales.
De acuerdo a recientes investigaciones, el ruido urbano es cada vez más alto, no solo por la cantidad de automóviles, sino por las aglomeraciones humanas en sí. Esto ocasiona que la música que se escuche sea cada vez más alta para compensar el ruido exterior.
Las más afectadas por el alto ruido o volumen son las células ciliadas encargadas de que podamos escuchar correctamente. Una sobrecarga en estas estructuras puede ocasionar, fatiga, o hasta la pérdida del sentido auditivo temporalmente. Todo dependerá del tipo de ruido al que se esté directamente afectado.
De conciertos y música personal
La salud en el aparato auditivo es fundamental para que cada persona pueda vincularse con el espacio que lo rodea y es uno de los sentidos más importantes. Sin embargo, muchos jóvenes no le prestan suficiente atención a este apartado, colocándose demasiado cerca de fuentes extremas de sonido, como en los conciertos.
Es importante reducir los niveles a los que se escucha música personal también, porque está probado que las células encargadas de la audición se pierden y no vuelven a regenerarse. Esto explica la sordera total o parcial y es el resultado de conductas descuidadas durante la juventud.