La cúrcuma es una planta herbácea originaria del sudeste asiático, cuyo rizoma se utiliza como especia, colorante y remedio natural. Es el principal ingrediente del curry, el famoso condimento de la cocina india, y tiene un sabor intenso y un color amarillo anaranjado característico. Pero la cúrcuma no solo es una planta aromática, sino que también posee numerosas propiedades beneficiosas para la salud, avaladas por la tradición y la ciencia.
Entre los nutrientes que contiene la cúrcuma se hallan las vitaminas C, E y K, la niacina, el sodio, el calcio, el potasio, el cobre, el magnesio, el hierro y el zinc. Sin embargo, el compuesto más importante y responsable de la mayoría de sus efectos es la curcumina, un antioxidante que le confiere su color y su actividad antiinflamatoria. Algunos de los beneficios y propiedades de la cúrcuma para la salud son los siguientes:
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Mejora la digestión: La cúrcuma ayuda a digerir bien los alimentos, alivia la sensación de empacho, la indigestión y previene la formación de gases y flatulencias. También estimula la producción de bilis y favorece la metabolización de las grasas. Además, tiene un efecto protector sobre la mucosa gastrointestinal, aliviando las úlceras, la gastritis y la gastroenteritis.
Desintoxica el hígado: La cúrcuma tiene un efecto descongestionante y restaurador sobre las células hepáticas, y contribuye a eliminar las toxinas del organismo. Está indicada en caso de alteraciones hepáticas, hepatitis leve y piedras en la vesícula. Refuerza el sistema inmunitario: La cúrcuma estimula las defensas naturales del organismo y ayuda a prevenir y combatir los resfriados, las gripes y las infecciones.
También tiene propiedades antibacterianas, antivirales y antifúngicas. Combate la inflamación: La cúrcuma es un potente antiinflamatorio natural, que puede aliviar el dolor y la hinchazón de las articulaciones, los músculos y los tejidos. Es útil para tratar la artritis, la artrosis, la tendinitis, la bursitis y otras enfermedades reumáticas.
Previene el envejecimiento: La cúrcuma es un antioxidante que combate los radicales libres, responsables del daño celular y del envejecimiento prematuro. También mejora la circulación sanguínea y la salud cardiovascular, previniendo la formación de coágulos, la hipertensión y el colesterol alto. Favorece la pérdida de peso: La cúrcuma ayuda a quemar las grasas y a reducir el tejido adiposo, gracias a su capacidad lipofílica y a su efecto termogénico.
Cuidados
La cúrcuma se puede ingerir de diferentes formas, como especia, infusión, cápsulas, extracto o tintura. La dosis recomendada varía según el tipo de producto y el objetivo que se persigue, pero en general se aconseja no superar los 3 gramos diarios de cúrcuma en polvo o los 400 miligramos de curcumina. También se recomienda acompañar la cúrcuma con pimienta negra, que potencia su absorción y su efecto.
La cúrcuma es una planta segura y bien tolerada, pero puede tener algunas contraindicaciones y efectos secundarios. No se debe ingerir en caso de alergia, embarazo, lactancia, obstrucción de las vías biliares, úlcera péptica, cálculos renales, trastornos de la coagulación o tratamiento con anticoagulantes, antiagregantes o antiinflamatorios. Además, puede causar irritación gástrica, diarrea, náuseas, reflujo o erupciones cutáneas si se toma en exceso o durante un tiempo prolongado.