Las favoritas de muchas personas y de los jardines son las suculentas. Estas plantas han llegado a alcanzar una popularidad increíble en los últimos tiempos, pues con sus variedades de especie, color y tamaño, no han hecho más que conquistar a todos y todas por igual.
Una de las características que hace que las suculentas sean las más elegidas por todos, es que no necesitan de muchos cuidados a comparación de otras especies, siendo que pueden sobrevivir con una cantidad limitada de agua y luz solar, por lo que son ideales para principiantes.
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Sin embargo, a pesar de que estas plantas pueden sobreponerse en toda clase de ambientes, lo cierto es que con los días de mucha lluvia, hay que tener en cuenta algunos consejos. Por esto, hoy te compartiremos algunos factores claves que debes tener saber para los días de lluvia.
Cuando se espere una precipitación fuerte, lo que muchos expertos consideran es mover las suculentas a un lugar protegido, a una zona donde la lluvia no sea directa y no pueda afectar sus hojas y raíces. Además, es necesario verificar que el drenaje de estas esté en óptimas condiciones.
Todas las suculentas necesitan de un buen drenaje, puesto que el agua estancada solo causará que la planta termine por perecer. Tanto para los días de lluvia como para cualquier otro, o para las suculentas que no están en macetas, el drenaje es fundamental para su desarrollo y supervivencia.
Obviamente, los días de lluvia no hace falta regar las suculentas, lo único por lo que debes preocuparte es porque reciban luz directa y estén en espacios ventilados, así la humedad no permitirá que se generen hongos u otras enfermedades que puedan dañarlas.
Más consejos
Luego de un día de lluvia, es fundamental revisar las suculentas y sobre todo las hojas, quitando aquellas que estén amarillas, blandas o tengan signos de pudrición. De esta manera, aportaremos una mejor circulación del aire, podando aquellas hojas dañadas o enfermas.
Además, recordar que el riego posterior a la lluvia debe ser reducirse, puesto que ya ha absorbido agua suficiente como para varios días. Para esto, es necesario tener en cuenta la temporada del año en la que nos hallamos y el tipo de suculenta que tenemos en el hogar.