La receta de los típicos rolls de canela, también llamados "kanelbulle", se dice que tiene origen sueco, ya que, según los datos que aporta la gastronomía, nació en la cocina de Suecia, convirtiéndose en un clásico para todos los ciudadanos de dicho país.
La receta de los rolls de canela ha llegado a cautivar a diferentes países, instalándose como una preparación ideal para acompañar las tardes de té. Por esta misma razón, al ser tan popular, se los puede hallar en cualquier panadería y restaurante.
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En esta oportunidad, buscando una opción más diferente, hemos decidido traerte y dejarte la receta de unos lemon rolls que, aunque no lo creas, sorprenderá a todos tus seres queridos, amigos y familia. ¿Estás listo para comenzar? Manos a la obra se ha dicho.
Para la masa necesitaremos: 150 cc de leche, 60 cc de agua, 75 g de manteca, 50 g de azúcar, 345 g de harina, 5 g de levadura, 1 huevo y sal. Por otro lado, en el relleno: ralladura de 2 limones, 100 cc de jugo de limón, 200 g de azúcar, 6 huevos y 50 g de manteca fría.
En el primer paso de esta receta activaremos la levadura con abundante leche tibia y azúcar. Reservar mientras tamizamos la harina, junto con la ralladura y el restante de azúcar. Formar una corona, con un huevo en el centro, para incorporar los líquidos.
Una vez listo, sumaremos los huevos, la preparación de la lavadura y la manteca, previamente derretida unos segundos en el microondas. Incorporar todo y dejar reposar. Mientras tanto, seguiremos con el relleno: en una cacerola añadir el jugo del limón, el azúcar y los huevos.
Pasos finales
Vamos a ir mezclando con ayuda de una espátula durante varios minutos. Cuando ya esté listo, será hora de retirar, agregar la manteca y mezclar hasta incorporar. Esta receta aconseja dejar enfriar el relleno, en la heladera, durante al menos 1 hora.
Para finalizar la receta, estirar la masa con ayuda de un palo hasta obtener una capa fina. Añadir en la superficie el relleno de limón, enrollar y cortar bollos grandes. Colocar, uno al lado del otro, en un molde y cocinar a un horno de 180° durante 30 minutos. Cuando esté listo, decorar con glasé de limón por encima.