Susana Giménez estrenó segunda transmisión de su programa con varios invitados que terminaron por costarle el fabuloso rating que tuvo en el inicio de su ciclo. Aunque parezca extraño, la diva está viviendo uno de los peores momentos en cuanto a audiencia.
Susana Giménez arrancó su segundo programa con la promesa de grandes entrevistas, pero poco sabía ella que las cosas podrían dar un giro considerado negativo en el ambiente televisivo. Ahora, se rumora que podría tener problemas con Telefe por no haber oído de sus advertencias.
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Poco antes de que se estrenara el primer programa de la rubia, se rumoraba que Telefe le habría apercibido de no pronunciarse a favor del gobierno, no por intentar acallar su voz, sino poque esto podría costarle audiencia, debido al malestar social imperante.
No obstante, lejos de hacer caso a las directivas del canal, la famosa no tuvo una mejor idea que entrevistar al mismísimo presidente de la nación y hasta se fotografió en el balcón de la Casa Rosada, causando una infinidad de comentarios negativos en su contra.
La molestia social se hizo presente en el segundo capítulo del programa de la conductora, ya que se vio un descenso de audiencia al momento de compartir la entrevista con Javier Milei. Es más, según lo que ha podido conocer, la entrevista con el presidente midió menos que la entrevista con Cristian Castro.
De acuerdo a las mediciones, la conversación con el máximo mandatario midió poco más de 13 puntos, lo que es insignificante para un programa como el de Susana. Este paso en falso podría haberle costado mucho más de lo que esperaba, pero eso podría darse a conocer en breve.
Las críticas
Susana Giménez se manifestó siempre en contra de los gobiernos peronistas y se ha expresado a fin a los gobiernos liberales. Vuelve luego de varios años radicada en Uruguay a donde viajó en tiempos de la pandemia por considerar que estaba en riesgo su libertad.
A su retorno a suelo nacional, cosechó las más feroces críticas contra su persona y se dice que los números de rating no reflejan el desinterés que ha experimentado en su audiencia. Como es sabido, IBOPE solo mide parte de las televisiones en el país, por lo que sus datos no son una medida confiable en lo absoluto.