Las suculentas han ganado popularidad en el mundo de la jardinería debido a su fácil mantenimiento y su capacidad para adaptarse a diferentes condiciones. Entre las diversas formas de cultivar suculentas, el método de cultivo en agua ha tomado relevancia por su simplicidad y estética única.
Las suculentas pueden alcanzar un gran desarrollo, incluso si se las cultiva en agua. Sin embargo, existen algunas que crecen más y mejor que otras, por lo que el día de hoy, te compartiremos cuáles son aquellas plantas que podrás cultivar en agua y no perecerán en el intento.
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Árbol de jade: con su distintiva apariencia de hojas carnosas y redondeadas, esta planta es una elección excelente para el cultivo en agua. Es resistente y puede prosperar con relativa facilidad en un recipiente con agua, permitiendo que sus raíces se desarrollen y absorban los nutrientes necesarios.
Espada de San Jorge: conocida también como lengua de suegra, la espada de San Jorge es una suculenta resistente que puede sobrevivir incluso en condiciones de poca luz. Cultivarla en agua es sencillo, ya que sus raíces se adaptan bien a este método y le confiere un toque contemporáneo a la planta.
Planta araña: esta suculenta, también llamada cinta o malamadre, es famosa por su capacidad para purificar el aire. Al cultivarla en agua, las raíces se desarrollan de manera impresionante, creando una exhibición única en la que las hojas caen graciosamente, añadiendo un toque decorativo al entorno.
Haworthia: las suculentas haworthia, con sus atractivas rosetas de hojas suculentas, son ideales para el cultivo en agua. Su sistema radicular es menos extenso en comparación con otras suculentas, lo que facilita su adaptación a este método de cultivo.
Echeveria y aloe vera
Echeveria: con sus exquisitas rosetas de hojas dispuestas en espiral, son suculentas ideales para el cultivo en agua. Sus raíces desarrollan un sistema eficiente que absorbe los nutrientes necesarios del agua, manteniendo la planta vibrante y saludable.
Aloe Vera: conocida por sus propiedades curativas, el aloe vera también puede cultivarse en agua. Sin embargo, es esencial proporcionar un entorno adecuado, con luz indirecta y un cambio regular de agua para evitar la acumulación de bacterias.