En un nuevo posteo en su cuenta de Instagram, espacio virtual en donde posee alrededor de cuatrocientos mil seguidores, Alberto Cormillot contó cuál es la enfermedad a la que son más propensos los mayores de 60 años. “Mala audición: un factor de riesgo para la demencia”, encabezó.
“Qué dicen los trabajos científicos al respecto y por qué es necesario consultar frente a la pérdida de audición. En las últimas décadas se produjo un aumento de la esperanza de vida, con mayor proporción en los mayores de 60 años”, continuó Alberto Cormillot.
Te podría interesar
“Esto se acompaña de un incremento de enfermedades que afectan profundamente la calidad de vida de las personas y sus familias e impactan en los costos del sistema sanitario, siendo el envejecimiento el principal factor de riesgo”, destacó el especialista en obesidad.
“La demencia es una de ellas. Incluye a un grupo de trastornos caracterizados por el deterioro de, al menos, dos funciones cerebrales: la memoria y la razón. Los síntomas más frecuentes son olvidos, aptitudes sociales restringidas y un razonamiento limitado que interfiere progresivamente en las actividades diarias”, destacó.
En cuanto a la prevención, contó: “La prevención de todos estos trastornos consiste en mantener (ante) control los factores de riesgo cardiovascular, realizar actividad física de manera regular, sostener una alimentación equilibrada y tener un buen sueño nocturno”.
El médico especializado en nutrición hizo énfasis en los factores de riesgo de la demencia y destacó dos enfermedades, una peor que la otra. “Sin embargo, existe otro factor de riesgo que impacta en la demencia: la disminución de la audición o hipoacusia”, resaltó.
Consecuencia
“Según los especialistas, la hipoacusia puede presentarse como consecuencia de algún trastorno del conducto auditivo externo (el más común, un tapón de cera), del oído medio (una otitis crónica) o en el oído interno (trauma acústico)”, detalló Alberto Cormillot.
“En el caso de los mayores, se llama “presbiacusia” a la pérdida auditiva (vinculada) con el envejecimiento y se manifiesta como la disminución de la capacidad auditiva, a veces bilateral (ambos oídos) y a veces progresiva que impide escuchar bien, especialmente ante varios interlocutores y en un ambiente ruidoso”, completó.