El Yoga facial, para hacer una breve introducción del tema, es un método de belleza que se realiza a través de una serie de ejercicios para tonificar los músculos del rostro. Su nombre está asociado a una práctica tranquila y relajada.
El Yoga facial busca, a través de su rutina de ejercicios que puede ser simple o con instumentos, promover la circulación sanguínea, el crecimiento del colágeno, estimular una piel elástica y mucho más brillante y joven, como lo que todas queremos.
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Para comenzar antes de las sesiones del Yoga facial, será fundamental hacernos presente en el “aquí y ahora”, recurrir a la respiración pausada y consciente en caso de vernos alterados por cualquier situación externa. Limpia tu mente antes de iniciar.
El Yoga facial, si bien se recomienda hacer de manera diaria, se suele recomendar cuando la piel del rostro se ve pálida o enrojecida o le empiezan a aparecer brotes de acné o manchas. Así también, no dejes de utilizar tu rutina para un cuidado más eficaz.
Pellizcos: estos masajes faciales, que se debe hacer con una fuerza medida para no ocasionar daños, se realizan a través de pellizcos en la piel y el músculo del rostro. Vamos desde el mentón, pasando por las mejillas, la nariz, los ojos y finalizamos en la frente.
El triángulo es uno de los masajes que más se utiliza en el Yoga facial, ya que controla la fuerza de las manos de manera automática. Junta tus dedos índices y separa los pulgares colocándolos sobre el mentón. Una vez en posición, despega las manos y coloca los índices en las mejillas.
Pasos finales
Drenaje: masajea desde abajo hacia arriba en pequeños círculos. Puedes ayudarte con algún gel de limpieza, espumas o aceites naturales. Termina siempre en la frente y drena desde las orejas hacia la clavícula y el cuello. Repetir 3 veces o durante 20 minutos.
Para finalizar, queremos aclarar que el Yoga facial combina tres principios fundamentales para oxigenar nuestro rostro y nutrir nuestra piel: masaje de acupresión, masaje estimulante y masaje de drenaje linfático. Recuerda que puedes elegir el que más te gusta, combinarlos o intercalar los días.