La China Suárez ha estado en el ojo de la tormenta en los últimos días, pues, al parecer, este 2024 comenzó repleto de polémica. Desde el día uno de este nuevo año, los escándalos con nuevos y viejos personajes no han dejado de acaparar los portales de noticias y farándula.
La China Suárez empezó el 2024 en Punta del Este, acompañada de Lauty Gram, su nuevo interés amoroso y con quien, todavía, no se ha dejado ver cariñosa ante las cámaras. Según lo que el mismo joven aclaró, prefieren llevar su romance de manera tranquila y sin rótulos que lo definan.
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Uno de los escándalos que más ha sonado, es aquel que involucra a la actriz y a la exnovia de Lauty Gram, Madison Segreti. La influencer aseguró que la China habría intentado “patotearla” en varias oportunidades, al punto de llegar a pedir ayuda a seguridad para poder retirarse del lugar.
Como era de esperarse, la ex “Casi Ángeles” no salió a confirmar o desmentir estos dichos, pues simplemente se dedicó a aprovechar de las vacaciones en compañía de sus hijos, quienes se unieron a ella en el país vecino unos días después, llevando como sorpresa a Benjamín Vicuña.
Las postales de la familia ensamblada no tardaron en llegar y a muchos les alegró que la cantante y el actor hayan podido dejar sus diferencias en el pasado. Sin embargo, mientras un nuevo escándalo surgía con Wanda Nara, la decisión de Eugenia llamaba la atención.
“La siesta no se negocia”.
En las historias de su cuenta personal de Instagram, la modelo dejó en claro que existe algo que para ella es imprescindible. “La siesta no se negocia”, expresaba la China, quien en muchas ocasiones confesó que una de las cosas que más le gusta hacer es dormir, además de comer.
Copia
En los últimos días, la China Suárez y Wanda Nara no han dejado de llamar la atención de los medios de comunicación, pues mucho se ha dicho de una supuesta pelea que surgió para saber quién copió a quién, siendo “Hello Kitty” la principal disputa.
Claramente, tanto una famosa como la otra, tienen un gran fanatismo por este personaje, pero para los fanáticos de ambas, esto no es suficiente. El fandom de cada una se ha empecinado por conocer quién fue la primera en evidenciar su fanatismo.