En época de vacaciones, la receta que te ayudará a preparar desayunos más nutritivos y deliciosos es sin lugar a dudas la de panqueques de avena. Su delicado sabor y los beneficios que tiene a la hora de la salud son innegables y pueden ser el nuevo predilecto de tu mesa.
La receta que ha escalado peldaños en esta temporada es la de panqueques de avena, ya que muchos deportistas los comen para fortalecer el organismo. Sin embargo, pueden ser los mejores compañeros de un desayuno de campeones para comenzar el día con toda la energía.
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Para hacer estos panqueques de avena se necesitarán los siguientes ingredientes de calidad: 3 huevos, 1 taza de harina de avena o avena en hojuelas, 2 tazas de leche, 1 cucharadita de esencia de vainilla y 1 cucharadita de polvo para hornear de buena calidad.
Se colocan los huevos y la vainilla en un recipiente y se baten hasta que estén perfectamente incorporados en un líquido un tanto blanquecino y con el triple de volumen. Se le coloca la harina y el polvo de hornear y la leche y se mezcla hasta obtener una masa con consistencia ni líquida ni sólida.
En una sartén antiadherente a buena temperatura se coloca la preparación del tamaño que se quiera y una vez transcurrido aproximadamente de 2 a 4 minutos se da vuelta. Cada panqueque puede tener el dorado del gusto de los comensales, pero se recomienda no dejarlo mucho a la llama, pues pueden perder humedad.
Finalmente, se sirven los panqueques de avena en la mesa y cada comensal puede determinar la cantidad a comer. Se pueden rociar con miel, almíbar, salsa de chocolate y con dulce de leche en su interior y plegarlos sobre sí mismos, si es que son bastante finos y no tan gruesos.
Otras ideas
Los panqueques de avena son una receta excelente para comenzar el día como desayuno, pero también se pueden preparar para una merienda abundante en época de vacaciones. Son los predilectos de los grandes y chicos, siendo presentados de formas variadas y deliciosas.
Uno de los acompañamientos por excelencia de estos panqueques son las frutas como frutillas, cerezas o duraznos en almíbar. Sin embargo, también se pueden acompañar de salsas dulces varias, como las de chocolate, dulce de leche, o frutos rojos. Las posibilidades son infinitas.