“¿Cuantas veces arrancaste un tratamiento para (mermar) de peso y creíste que te iban a dar “la dieta” o “el plan” qué te iba a hacer (descender) y listo?”, comenzó diciendo Estefanía Pasquini en una reciente publicación en Instagram, donde mencionó qué cuestiones se debe tener en cuenta para perder peso.
“Bueno, algunas veces es mucho más que eso. No es qué comer. Si no cómo lo comemos, cuándo lo comemos, emociones, ánimos y tantas cosas más que nos pasan”, mencionó Estefanía Pasquini en cuanto a las estrategias que deben prestar atención antes de dar el primer paso.
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La esposa de Alberto Cormillot asegura que esas estrategias son fundamentales. “Si no empezamos a ordenar e ir armando una nueva forma de ir por la vida, por más que tengamos el plan más lindo del mundo va a seguir siendo lo más irrealizable en la vida”, aclaró.
“¿Entonces, estás dispuesto a afrontar cada cosita qué hoy no te ayude o vas a seguir esperando la dieta qué te adelgace?”, completó la especialista en nutrición al pie del video que dejó en su red social favorita: Instagram, en donde posee más de ciento cincuenta mil seguidores.
La desafortunada verdad es que la mayoría de las estrategias para perder peso no funcionan a prolongado plazo, y algunas incluso pueden empeorar las cosas o causar otros daños. Pero eso no significa que tratar de perder peso sea inútil. Los estudios comprueban que algunos enfoques son, de hecho, efectivos.
Los tipos de ejercicio que la mayoría de nosotros hacemos queman relativamente pocas calorías. Los estudios hallan que el ejercicio aeróbico moderadamente intenso, como caminar durante 30 minutos al día, cinco días a la semana, la cantidad recomendada para una buena salud, generalmente produce poca o ninguna pérdida de peso.
Realidad
Perder peso requiere ejercicios más vigorosos y sostenidos de los que la mayoría de las personas están dispuestas o son capaces de hacer. Incluso si logramos aumentar tanto nuestras rutinas, nuestro organismo pueden compensar aumentando el apetito y ralentizando el metabolismo, efectos que limitan la cantidad de libras que perdemos.
Ver el ejercicio como un método para perder peso crea expectativas poco realistas que nos hacen más propensos a abandonar la actividad física. Y convierte el ejercicio en una especie de castigo, un precio que debemos pagar para adelgazar y que, por tanto, nos inclinamos a evitar. Por eso Estefanía Pasquini insiste en que cada plan o actividad se debe adecuar a la realidad de uno mismo.