Flor Vigna concedió una prolongada y develadora entrevista a un reconocido portal. La joven habló del complicadísimo presente que afronta, al gastar mucho tiempo y energía para hacer realidad su sueño de ser cantante.
"Hoy, con todo lo que estoy haciendo ocupo el 80% de mi tiempo en producirlo, ya que nadie me convocó. Me hubiese encantado que me digan: Te quiero a vos para este proyecto, pero como no sucedió, lo tuve que empezar a crear yo", arrancó Flor Vigna.
Y reconoció: "Entonces es la primera vez que soy líder de equipos y tengo que poder ser exigente y, a la vez, relajada, porque entendí que la mente saturada no funciona tan bien".
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La fémina habló de la influencia de sus padres: "Mis papás son de la época en que la mayoría se convertía en padres muy temprano y de repente tenían que buscar la forma de tener una mejor economía, entonces lo (hallaban) a través del comercio. Tuvieron kiosquito. Y mi hermano fue el primero que dijo: Yo me enamoré del teatro. A partir de ahí él me empezó a llevar también a ciertas becas de estudio, castings; no quedábamos en ninguno pero nos acompañábamos".
Flor Vigna remarcó que lo suyo no fue suerte, sino trabajo: "Habré empezado a los 11 años y "Combate", que fue la primera gran oportunidad, fue a los 18. Y justo mi mamá ayer me recordaba que el primer casting en el que quedé fue el de una gaseosa muy importante, y como yo cumplía 16 años y se me vencía el DNI, y esto se grababa en Uruguay, no pudimos ir. Mi mamá me comentaba: Eso para vos fue fatal, lloraste por años".
Y contó: "Sobre todo la motivación venía desde el lado de mi mamá. Le preocupaba un poco, porque no veníamos de una estabilidad económica fuerte, que mi hermano se quisiera dedicar a ser actor y que yo también fuera por el lado artístico. Entonces, buscábamos la forma. Gracias a la beca que me dieron en las escuelas de Julio Bocca, de Reina Reech y en otro colegio de teatro, pude estudiar".
Casas separadas
Luciano Castro contó que con Flor prefieren no convivir: "No vivimos juntos y por semana quizá nos vemos tres o cuatro veces, pero es porque laburamos mucho y porque no andamos corriendo para vernos".
El galán se sinceró: "Sabemos que cuando nos vemos, compartimos tiempo de calidad y compartimos más de esa manera. Está todo hablado y eso hace la vida más fácil".