Si estás buscando lograr un espacio verde en tu hogar, debes saber que hay tareas imprescindibles que debes llevar a cabo y que las mismas son fundamentales para mantener la vitalidad de cada una de las plantas que incorpores en este sector.
Si bien, existen cientos de tareas y recomendaciones a la hora de cuidar las plantas, lo primordial es que conozcas bien cada uno de los ejemplares que están en tu espacio verde, o aquellos que quieres incorporar.
Conocer las características de las plantas que integran el espacio verde del hogar, es clave para saber cuánta agua hay que aportarle a cada ejemplar, dónde ubicarlas (sol directo o media sombra), el abono y sustrato que necesitan para un mejor desarrollo.
Como mencionamos anteriormente, si bien hay muchas tareas que se deben llevar a cabo a la hora de realizar el mantenimiento de los espacios verdes, en esta nota te hablaremos de 2 recomendaciones claves para lograr un jardín reluciente.
En primer lugar, destacaremos de la importancia de la limpieza: esta tarea incluye juntar las hojas secas, realizar las podas correspondientes, quitar las malas hierbas y cortar el césped. Esta tarea de mantenimiento, permite que cada una de las plantas crezca y se desarrolle de manera correcta, además, se evita la acumulación de residuos, plagas, e insectos indeseables como los mosquitos.
Otra de las tareas fundamentales en el cuidado de las plantas y espacios verdes es el abono. Remover y renovar la tierra del suelo y las macetas, ayuda a que cada uno de los ejemplares obtenga los nutrientes que necesita para su crecimiento, pero esto, va a depender del tipo del ejemplar que tengas en tu hogar, es por ello que es fundamental que conozcas cada uno, para saber específicamente cada cuánto debes abonarla.
Sobre el riego
El riego es uno de los pasos fundamentales e indispensables para mantener la vitalidad de nuestras plantas, sin embargo, debes saber que el exceso o la falta de agua, puede terminar acabando con los ejemplares que tengas en el hogar.
Para evitar esto, lo fundamental es que conozcas tus plantas y sepas cada cuánto debes regarlas, ya que no todas necesitan recibir agua a diario, como es el caso de los cactus y las suculentas.