Al igual que sucede en casi todas las recetas, sin importar la comida que sea, hay muchas versiones y formas de llegar a un mismo producto final. En este caso te contaremos algunos detalles que hay que tener en cuenta para que puedas preparar la mejor tarta de ricota.
Para hacer una tarta de ricota, que es una de las recetas más populares en lo que respecta a postres, necesitaremos 200 g de manteca, 150 de azúcar, la ralladura de medio limón, esencia de vainilla, dos huevos, 400 g de harina tamizada con 10 g de polvo para hornear y un poco de sal.
El primer paso es batir la manteca con el azúcar. Luego le agregaremos la ralladura de limón, la esencia de vainilla y los huevos, uno a la vez. En paralelo, formaremos una corona con la harina tamizada y el polvo para hornear, donde volcaremos la mezcla previamente hecha.
Te podría interesar
Luego integraremos todos los ingredientes con una espátula hasta lograr una consistencia granulada. Ahora estamos listos para “fresar”. Este proceso consiste en aplastar la masa con las manos sin amasar. Es importante que se pueda realizar este paso con la menor cantidad de movimientos posible.
El siguiente paso es formar un bloque de algunos centímetros de alto y tras taparlo con papel film, lo llevaremos a la heladera, como mínimo una hora. Si preferís hacer esta receta con mayor tranquilidad, también es posible realizar la masa de un día para el otro.
Mientras dejamos enfriar la base de la tarta de ricota, prepararemos el relleno. Para ello necesitaremos 600 g de ricota entera, 200 g de queso crema y 5 claras de huevo. A esta mezcla le agregaremos 150 gramos de azúcar y la ralladura de medio limón.
El armado
No quedan dudas de que tarta de ricota es una de las recetas más fáciles de realizar. Para su armado, retiraremos la masa del frío y la estiraremos hasta llegar a las dimensiones que nos permitan ocupar cada espacio de la tartera que utilizaremos para cocinarla.
Luego de colocar la masa en el molde, le agregaremos el relleno y la taparemos. Luego pincelaremos los bordes con huevo para que la tapa pueda adherirse de la mejor manera, y la pincharemos con un tenedor para que pueda salir el vapor durante la cocción.