L Gante decidió dar un paso al costado en su vínculo con Wanda Nara, luego de que la novela de esta con Icardi hubiera escalado a puntos que el cantante no estaba dispuesto a tolerar. Desde entonces tomaron caminos separados, hasta que volvieron a reencontrarse.
L Gante y Wanda Nara fueron vistos hace algunos días en un boliche, pero ambos se retiraron del lugar por separado. Esto habría dado un panorama de lo que se venía, debido a que varios días después viajaron a Córdoba, desde donde confirmaron lo que se preveía.
El cantante y la empresaria se separaron en lo que parecía un momento definitivo en su pareja y hasta enviaron un comunicado conjunto de la decisión que habían tomado. Sin embargo, volvieron a estar juntos, confirmando su noviazgo nuevamente.
Por medio de unas postales en su cuenta personal de Instagram, la famosa y el artista oficialmente están de novios, una vez más. Una noticia que ya no sorprende como antes, pues ambos ya forman parte de lo que la gente ha llamado el “circo de la temporada”.
Esta novela de acción y reacción ya ha perdido un poco de impacto en la gente, debido a que muchos saben cómo se han comportado durante estos años. De hecho, la noticia de la reconciliación llega después de que se confirmaran las intenciones de la China Suárez de viajar a Estambul con Icardi.
Lo que parecía un problema familiar ha escalado a un nivel mediático que ya no es entretenido para los que lo seguían con atención, pues se ha involucrado a los hijos de los protagonistas. Algo que a priori era el límite de la cuestión y que por estas horas ha sido avasallado.
Las teorías del complot
L Gante y Wanda Nara confirmaron que están nuevamente en pareja, pero muchos piensan que esto es solo una maniobra para atraer más atención mediática sobre sus personas y como una respuesta a los trascendidos que marcaban que la China viajaría a Turquía con Mauro.
Por otro lado, hay quienes consideran que el supuesto noviazgo de la conductora con el cantante responde a las intenciones de esta de generar escándalo para estar siempre vigente. No le ha temblado el pulso para vivir de ello y ciertamente no lo hará.