Los billetes argentinos con errores de impresión pueden venderse a muy buen precio en una conocida plataforma digital que conecta compradores y vendedores de todo el planeta.
Por ejemplo, una persona acaba de poner en venta una divisa muy especial: "Billete de $100 argentino con error de impresión en la tinta".
Y aclara un punto importante: "Del lado donde se encuentra las montañas tendría que ser de un color violeta claro y este tiene un color rosado".
Un cibernauta le preguntó: "¿Son 2 billetes?". El vendedor explicó: "Hola, ¡buenas tardes! Es solo el billete con el error de corte. El otro billete es de comparación para que se vea el error".
Otra persona consultó por el mismo tema: "Hola, ¿por cuánta unidad los vende?". El vendedor respondió: "Por el precio que figura en la página".
Por el momento, el oferente tuvo muchas personas interesadas, pero ninguna accedió a pagar el precio que él exige por la divisa (todos quisieron convencerlo que bajara considerablemente sus expectativas).
Emisión de billetes: antes y ahora
Hoy, un banco central o un tesoro público suele ser el único responsable de la emisión de billetes en un Estado, pero no siempre fue así.
Históricamente, el papel moneda de los países solía ser gestionado por bancos privados. De esta forma, en un país determinado pueden haber emitido billetes muchos bancos o instituciones diferentes.