“Gran Hermano” es considerado uno de los programas más famosos de la pantalla chica nacional y es posiblemente uno de los que más controversias ha cosechado, desde su estreno hasta su última edición que tuvo su culminación hace algunos meses.
“Gran Hermano” ya está en planes de volver a estrenar nueva temporada en un par de semanas, sin embargo, una incógnita ha surgido en el entorno de los que siguen el reality continuamente y es que se ha convertido en una salida fácil para los problemas modernos.
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El show de Telefe es famoso por recompensar a la señal en términos de publicidad, pero también otorga a sus concursantes la posibilidad de hacerse un nombre en el ambiente farandulero nacional, si es que su personalidad así lo ayuda.
No obstante, algunos analistas mencionan que el fenómeno “Gran Hermano” tiene tanta fama por otras razones. Uno de los principales motivos por los que las personas intentan ingresar a la casa más famosa es que pueden hacerse con una gran cantidad de dinero en efectivo en tan solo un par de meses.
Recordemos que el último ganador del show se embolsó un monto superior a los 70 millones de pesos, una moto, una casa prefabricada valuada en más de 5.000 dólares al cambio de hoy, más otro tipo de beneficios que redundan en ganancias para el campeón.
En entrevistas recientes con gran cantidad de personas que se anotan al casting, la gran mayoría confesó que lo hace por ganar un monto en efectivo que los pueda ayudar a paliar la situación de crisis actual, pero también para ayuda a familiares que no han tenido tanta suerte.
Los extras
Ganar “Gran Hermano” puede ayudar a hacerse con una gran cantidad de dinero, pero también a hacerse conocido en el ambiente farandulero que puede resultar en ganancias mucho mayores en concepto de patrocinios, presentaciones en TV y privadas, etc.
Se dice que un participante puede culminar su contrato con Telefe, pago de un gran monto mediante, y dedicarse ciento por ciento a facturar por su propia voluntad en los sitios en los que prefiera, con las ganancias descomunales y multimillonarias.