Domingo 28 de Abril 2024
ALBERTO CORMILLOT

La peligrosa combinación que Alberto Cormillot recomienda evitar en el desayuno

La palabra de Alberto Cormillot.

Escrito en ENTRETENIMIENTO el

Alberto Cormillot, reconocido médico nutricionista de la Argentina, recomendó a todos sus seguidores tener cuidado con las mezclas que se suelen hacer tanto en el desayuno como en otras comidas del día. En este caso hizo énfasis en el pomelo y los medicamentos.

Alberto Cormillot aseguró que el pomelo, que es una fruta cítrica que tiene muchos beneficios para la salud, como aportar vitamina C, antioxidantes y fibra, al interactuar con algunos medicamentos puede causar efectos adversos graves.

El pomelo contiene unas sustancias químicas llamadas furanocumarinas, que pueden inhibir una enzima del intestino llamada CYP3A4. Esta enzima es la encargada de metabolizar, es decir, de inactivar o eliminar, muchos medicamentos que se toman por vía oral.

Al bloquear esta enzima, el pomelo puede aumentar la cantidad de medicamento que llega al plasma y, por tanto, potenciar sus efectos o generar una sobredosis. Por eso, Cormillot insiste en que se debe tener cuidado de mezclar pomelo con ciertos medicamentos y consultar siempre a un profesional o al farmacéutico antes de hacerlo.

Los medicamentos que pueden interactuar con el pomelo son aquellos que se administran por vía oral, que tienen una poca o media biodisponibilidad (es decir, que se absorben poco o regularmente) y que se metabolizan por el CYP3A4.

Entre ellos se hallan algunos fármacos para tratar la hipertensión, el colesterol, las infecciones, los problemas cardíacos, el rechazo de órganos trasplantados, la ansiedad, las alergias, las convulsiones, el mareo, la disfunción eréctil, el déficit hormonal, la tos o el dolor.

Consecuencias

Las consecuencias de la interacción entre el pomelo y estos medicamentos, según Alberto Cormillot pueden ser muy variadas y dependen del tipo y la dosis de medicamento, de la cantidad y el momento de ingesta del pomelo, y de las características individuales de cada persona.

Algunos ejemplos de efectos adversos son: arritmias cardíacas, rabdomiólisis (destrucción muscular), mielotoxicidad (daño en la médula ósea), depresión respiratoria, hemorragia gastrointestinal, nefrotoxicidad (daño renal), somnolencia, sangrado, hipotensión o hipertensión.