La sal es un condimento muy utilizado en la cocina, pero también puede ser perjudicial para la salud si se ingiere en exceso. La Organización Mundial de la Salud recomienda no superar los 5 gramos de sal al día, ya que un ingesta mayor puede aumentar el riesgo de hipertensión, enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y otras complicaciones.
Por eso, es importante aprender a reducir la cantidad de sal que añadimos a nuestros platos, y buscar alternativas más saludables que realcen el sabor de los alimentos sin comprometer nuestra salud. Algunas de estas alternativas a continuación.
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Las plantas aromáticas son una excelente opción para darle un toque de sabor y color a nuestras recetas. Podemos usar tomillo, orégano, romero, salvia, albahaca, perejil, cilantro y muchas más. Además, algunas de estas plantas tienen propiedades beneficiosas para la salud, como el tomillo, que es antiséptico y expectorante, o el orégano, que es antioxidante y antiinflamatorio.
Las especias son otro recurso muy útil para sustituir la sal y conseguir platos más sabrosos y variados. Podemos usar pimienta, comino, cúrcuma, curry, canela, nuez moscada, jengibre, clavo y otras más. Las especias también aportan beneficios para la salud, como el comino, que favorece la digestión y el metabolismo, o la cúrcuma, que tiene propiedades anticancerígenas y antiinflamatorias.
El limón es un ingrediente muy versátil que puede usarse para aderezar ensaladas, pescados, carnes, verduras y otros platos. El limón aporta un sabor ácido y refrescante, y también tiene propiedades antioxidantes, depurativas y alcalinizantes.
El ajo y la cebolla son dos alimentos básicos en la cocina, que pueden usarse tanto crudos como cocinados, y que dan mucho sabor y aroma a los platos. El ajo y la cebolla también tienen propiedades antibióticas, antifúngicas, antiinflamatorias y reguladoras de la presión arterial.
Alternativas
El aceite de oliva virgen extra es la grasa más saludable que podemos usar para cocinar y aliñar nuestros platos. El aceite de oliva virgen tiene un alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados, que protegen el corazón y el cerebro, y en antioxidantes, que previenen el envejecimiento celular.
Estas son solo algunas de las alternativas que podemos usar para sustituir la sal y conseguir platos más saludables y deliciosos. Lo importante es experimentar con diferentes combinaciones y sabores, y disfrutar de una alimentación equilibrada y variada.