El pastel de papas es un platillo reconfortante y delicioso que suele ser apreciado por muchas personas. Esta receta sencilla te permitirá degustar de un pastel de papa casero sin complicaciones ni ingredientes difíciles de conseguir. Con tan solo algunos pasos fáciles, podrás preparar un plato que seguramente maravillará a tu familia y amigos.
Para comenzar con la receta, necesitarás reunir los siguientes ingredientes básicos del pastel de papa: papas, mantequilla, leche, huevos, queso rallado, sal y pimienta al gusto. Estos elementos son comunes en cualquier cocina, lo que hace que esta receta sea aún más accesible y rápida de realizar.
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El primer paso es pelar y cortar las papas en rodajas finas. Puedes utilizar una mandolina o simplemente un cuchillo afilado para asegurarte de que las rodajas sean uniformes y se cocinen de manera pareja.
A continuación, en un sartén grande, derrite una porción de mantequilla a temperatura media y agrega las rodajas de papa. Cocínalas hasta que estén tiernas y ligeramente doradas, asegurándote de sazonarlas con sal y pimienta al gusto mientras se cocinan.
En otro recipiente aparte, mezcla la leche y los huevos hasta obtener una mezcla homogénea. Esta combinación será el aglutinante que dará consistencia al pastel de papas.
Luego, precalienta tu horno a una temperatura de 180 °C. Mientras tanto, en un molde para hornear previamente engrasado, coloca una capa de papas cocidas y espolvorea una cantidad generosa de queso rallado sobre ellas.
Pasos finales
Repite el proceso anterior, intercalando capas de papas cocidas y queso rallado hasta que se agoten los ingredientes. Asegúrate de terminar con una capa de queso en la parte superior para obtener un dorado y gratinado apetitoso.
Finalmente, vierte la mezcla de leche y huevos sobre las capas de papa y queso, asegurándote de que toda la preparación quede bien tapada. Hornea el pastel de papas durante unos 25 minutos, o hasta que veas que la mezcla de leche y huevos ha cuajado y el queso de la parte superior se ha derretido y dorado.