La chocotorta es un clásico postre nacional que combina una serie de ingredientes para crear una delicia que ha sido reconocida en todo el mundo y en portales especializados de gastronomía internacionales, junto a otros manjares clásicos.
La clásica receta de chocotorta mezcla galletas de chocolate, dulce de leche y crema, dando como resultado un postre al mejor estilo argentino. En esta nota tenés una receta para preparar el mejor postre y sorprender a todos tus afectos.
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Como primera medida, se necesitarán los siguientes ingredientes: 400 g de galletas de chocolate, 500 g de dulce de leche, 500 ml de crema para batir, 2 cucharadas de azúcar, 1 cucharadita de esencia de vainilla, café fuerte (suficiente para humedecer las galletas) y chocolate rallado o cacao en polvo para decorar
En un recipiente, mezcla la crema para batir, el azúcar y la esencia de vainilla. Bate hasta obtener una consistencia firme. Reserva en el refrigerador. En otro recipiente, mezcla el dulce de leche hasta que quede suave y cremoso. En un plato hondo, prepara café fuerte y déjalo enfriar. No es necesario endulzarlo.
Comienza a armar la chocotorta. Sumerge rápidamente las galletas de chocolate en el café y colócalas en el fondo de un molde rectangular, formando una capa. Recubre las galletas con una capa de dulce de leche respetando la forma y la disposición.
Repite el proceso de colocar las galletas en el café y luego en el molde, seguido de una capa de dulce de leche, hasta completar varias capas. Una vez que hayas formado varias capas, cubre la última capa con la crema batida que habías reservado. Esparce uniformemente.
Pasos finales
Decora la chocotorta con chocolate rallado o cacao en polvo. Luego, lleva el postre al refrigerador y déjalo reposar durante al menos 4 horas o toda la noche para que las galletas se ablanden y se integren con los demás ingredientes.
La chocotorta estará lista para degustar. Puedes cortarla en porciones individuales y servirla fría. Es fantásticamente recomendada para la hora de la merienda de los chicos o simplemente una porción bien servida durante ese momento de antojo.