Barby Franco, quien viene de ser noticia nacional por no haber tenido el dinero suficiente para pagar las cosas que cargó en un “changuito” de supermercado y se quejó de los exorbitantes precios de las cosas, acaba de dejar un mensaje en las redes que sorprendió a todos por igual.
Podríamos asegurar que Barby Franco transita uno de sus mejores momentos personales tras la llegada al mundo de Sarah, hija que nació del amor con Fernando Burlando. Pese de haber dicho que el lado “B” de la maternidad no es lo que esperaba, la bailarina parece estar lista para un nuevo “encargo”.
A mitad de semana, la modelo dejó una “historia” en su cuenta de Instagram tan significativa que fue tomada por sus seguidores como un palito para su pareja, el reconocido abogado de los famosos. Claro, es que la idea de la Barby no se podría completar sin la ayuda de su pareja.
Si bien lo buscó por muchos años y pasó por distintos tratamientos, en donde cada vez la frustración era más grande ya que la gestación no se daba ni artificial ni naturalmente, la modelo parece querer volver a transitar todo ese proceso para darle un hermanito a Sarah.
“Creo que tengo ganas de tener otro, me agarró la melancolía”, escribió la bailarina sobre una foto en donde se ve a su hija con apenas unos segundos de haber nacido. Teniendo en cuenta la seguidilla de publicaciones, Barby está convencida de agrandar la familia cuanto antes.
Cuando apenas llevaba unas semanas de dar a luz, la pareja del abogado se presentó en “LAM” y contó cómo vive la maternidad. “Sarah se porta re bien, es una santa. A mí la parte B no me la explicaron nunca. Me dijeron que es lo mejor del mundo, vas a ser súper feliz, pero la parte B nadie me la contó”, relató.
Cólicos y algo más
“De los cólicos no tenía idea, lo (conocí) con ella”, mencionó Barby Franco sobre las cosas que habitualmente suceden con los chicos. “(Conocí) los cólicos, no dormir más, levantarme todos los días a las 7 u 8 de la mañana, que no estaba en mis planes”, repasó.
“Darle la leche cada una hora y media o dos es mucho. Me levanto a las siete de la mañana porque Sarah tiene un reloj. Ella hace todo bien, toma leche, hace provechito y se va a dormir. Pero, con los cólicos la pasamos mal la semana pasada, pero ahora estamos bien”, contó.