En un mano a mano con El Planeta Urbano, Luciano Cáceres contó qué lo moviliza para decir sí a un trabajo o una propuesta. Como no podía ser de otra manera, el artista tuvo que marcar una diferencia entre la continuidad actoral o el dinero. “Mirá, yo intento más o menos establecer una prioridad económica”, comenzó diciendo.
“Algo que me va a organizar porque hay cuotas que hay que pagar todos los meses y siempre está bueno saber cuál va a ser el trabajo que más o menos va a bancar el año. Sabía que con lo del San Martín no iba a suceder, entonces en paralelo podía hacer esto y completaba bien”, agregó Luciano Cáceres dejando en claro que muchas veces la necesidad obliga.
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“Pero después, de todas las cosas que me ofrecían, me parecía interesante esta propuesta, volver a laburar con StoryLab, con quien hicimos "Estocolmo" hace tiempo; y con Diego Palacios hace mucho que íbamos a hacer otra y por agenda no lo pudimos hacer. Y se dio, congeniar todo”, destacó. Por otro lado, mencionó sí se toma el tiempo para analizar las propuestas.
“Siempre, sin duda. Sí, para eso estamos vivos, para que las cosas se den por algo y tengan sentido. Yo soy de esos que piensan que está bueno estar en movimiento porque eso genera movimiento. Y también tiene que ver con esto, volviendo a la charla inicial con respecto a la prensa, que es parte del movimiento para que la rueda siga girando no solo para mí, sino para el resto”, contó.
“Hay que apoyar las ficciones para que se sigan haciendo. Y es responsabilidad de uno también estar en las ficciones por más que sean argentinas, estar en una tira diaria, con otro presupuesto o lo que sea. Uno tiene que estar porque si no, justamente, desaparece”, mencionó el artista sobre la oferta disponible en estos momentos.
“Pero no soy tan interesante en mi vida personal. Voy viendo cómo se da, tampoco tengo (algo) que ocultar. Igual sí, soy muy no quiero decir “introvertido” porque no sería la palabra. Pero mi casa es mi casa, es mi mundo, mis pantuflas. De (repente) ahora me preguntan mucho por Amelia y por mi pareja, pero está todo cuidadito ahí. No es tan interesante”, contó sobre lo poco que se presta a los micrófonos.
Momento de desmentir
En cuanto a notas o supuesta información de su vida personal, Luciano Cáceres mencionó que muchas veces es necesario salir a desmentirlas. “Sí. Y bueno, ella también tiene otro acceso a la información y tiene su propia lectura. Puede pasar”. A su vez, mencionó que eso no forma parte de su trabajo. “No, no es parte del laburo. No tiene que ver con mi trabajo mi vida privada”, dijo.
“Mi vida privada es mi vida privada. Hay otras personas que conviven muy bien con hasta (colocarle) un precio a la vida privada. Yo no lo sé hacer. Hay personalidades que son mucho más mediáticas y de la situación esa pueden (tomar) un rédito. Yo no sé cómo se hace”, completó tajante sobre la situación que ve a menudo.