¿Qué tienen en común las manzanas verdes y rojas? Ambas son frutas deliciosas, nutritivas y saludables que podemos aprovechar en cualquier momento del día. Sin embargo, ¿sabías que cada una de ellas tiene sus propias características y ventajas para nuestro organismo? En este artículo te contamos cuáles son las diferencias y los beneficios de las manzanas verdes y rojas, para que puedas elegir la que más te convenga según tus necesidades.
Las manzanas verdes: ácidas y antioxidantes. Las manzanas verdes se caracterizan por su sabor ácido y refrescante, que las hace ideales para consumir en verano o como postre después de una comida pesada. Su color verde se debe a la presencia de clorofila, un pigmento vegetal que tiene propiedades desintoxicantes y alcalinizantes para el organismo.
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Entre los beneficios de las manzanas verdes, podemos destacar los siguientes: Son muy ricas en fibra, especialmente en pectina, un tipo de fibra soluble que ayuda a regular el tránsito intestinal, prevenir el estreñimiento, reducir el colesterol y controlar el azúcar. Tienen un alto poder antioxidante, gracias a su contenido en vitamina C, vitamina E, flavonoides y polifenoles.
Ayudan a descender de peso, ya que tienen un efecto saciante que reduce el apetito, aceleran el metabolismo y facilitan la eliminación de líquidos y toxinas. Además, tienen un poco contenido calórico (unas 50 calorías por 100 gramos) y son ricas en agua (85%). Mejoran la salud bucal, ya que al masticarlas se produce más saliva, lo que limpia los dientes, previene las caries y el mal aliento, y neutraliza los ácidos que dañan el esmalte.
Las manzanas rojas: dulces y depurativas: Las manzanas rojas se distinguen por su sabor dulce y suave, que las hace perfectas para ingerir como snack o para preparar postres y compotas. Su color rojo se debe a la presencia de antocianinas, unos pigmentos vegetales que tienen propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas.
Son una fuente de hierro, un mineral esencial para la formación de la hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno a los tejidos. El hierro previene la anemia, mejora la energía y la resistencia física, y favorece la cicatrización de las heridas. Tienen un efecto depurativo, ya que estimulan la función del hígado y del riñón, los órganos encargados de filtrar y eliminar las sustancias nocivas del organismo.
¿Qué manzana elegir?
Como hemos visto, las manzanas verdes y rojas tienen beneficios similares y diferentes para nuestra salud. Ambas son frutas muy completas y recomendables para incluir en nuestra dieta diaria. Sin embargo, según nuestras necesidades o preferencias, podemos elegir una u otra variedad. Por ejemplo, si queremos perder peso, mejorar la digestión o proteger la piel del sol, podemos optar por las manzanas verdes.
Si queremos prevenir la anemia, depurar el organismo o cuidar el corazón, podemos escoger las manzanas rojas. Y si queremos aprovechar de todos los beneficios de estas frutas, podemos combinarlas e ingerirlas alternativamente. Lo importante es ingerir las manzanas con su piel, siempre que sean de cultivo ecológico y estén bien lavadas. De esta forma, aprovecharemos todos sus nutrientes y su fibra.