Como espectadores de la pantalla chica, conocemos el increíble desempeño que Luciano Castro siempre ha dejado en evidencia frente a las cámaras. Así, y con el paso de los años, logró ser incorporado al listado de celebridades que no podríamos dejar de mencionar.
Después del arrollador éxito que trajo consigo la ficción “El primero de nosotros”, Luciano Castro parecería haber decidido no quedarse quieto y continuar en el ámbito de la actuación, donde ha sabido formar parte de las más populares producciones nacionales.
En la actualidad, manteníamos el contacto con Luciano Castro gracias a verlo presente en la mencionada producción trasmitida por Telefe y Paramount Plus, en la que volvió a dejar su marca. A su vez, también nos conectamos con él vía redes sociales, como viene siendo usual para cualquier estrella.
Ha sido justamente por este medio que el reconocido actor quiso dar a conocer un impactante dato, de suma relevancia para quienes vienen siguiendo su trabajo desde sus inicios, o que simplemente le han tomado aprecio y admiración en algún punto del camino.
Nos referimos al próximo proyecto del que Luciano Castro formará parte: “El divorcio”, una comedia que verá la luz a fines de diciembre de este año, a modo de comienzo de la temporada teatral de verano en Mar del Plata. Pero no enfrentará solo semejante desafío.
Habiendo hecho uso de una historia en su cuenta oficial de Instagram, el intérprete soltó un adelanto de lo que se vendrá este verano con su nueva obra, mediante un registro que lo dejaba ver acompañado por Natalie Pérez, coprotagonista de la creación de Nelson Valente, producida por Javier Faroni.
Más unidos que nunca
Todo parece apuntar a que el destino le sonríe a Luciano Castro, quien no solo estaría triunfando en el mundo de la actuación, sino también en lo que refiere a sus vínculos sentimentales. Esto pudo ser confirmado recientemente, gracias una perspicaz observación.
Como bien sabemos, el actor está viviendo un momento muy bueno a nivel personal con quien es su actual pareja, Flor Vigna, al punto de que podrían haber tomado una decisión que cambiará sus vidas para siempre: el compromiso. Así lo dejaban en evidencia en uno de sus registros, llevando colocados dos curiosos anillos.