Como todos recordarán, Luis Ventura, meses atrás, vivió un momento muy dramático junto a su hijo Antoñito, quien debió ser internado de urgencia por padecer fiebre por varios días. Para colmo, en aquel momento se filtraron los nominados a los Martin Fierro Cable, lo cual generó una polémica.
Tras volver un poco a la normalidad y con su hijo siendo atendido constantemente, Luis Ventura, con algo de remordimiento y culpa, se animó a contar minuciosos detalles de cómo fue el parto de Fabiana Liuzzi y dejó entrever que existieron cosas que debieron haber sido de otra manera.
El hijo del periodista nació de manera prematura el 27 de abril de 2014. El poco tiempo de gestación le trajo a Antoñito diversas secuelas neurológicas irreversibles. Por ejemplo, el niño con ocho años de edad aún no puede hablar y solo emite algunos sonidos para hacerse entender.
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“Antoñito nació pesando menos de un kilo, estuvo 54 días en neonatología en una clínica en Córdoba capital. Y nació prematuro, si no me equivoco, de seis meses y medio”, sostuvo Luis en diálogo con el médico Guillermo Capuya sobre cómo fue el nacimiento de su hijo.
El histórico conductor de “Intrusos” mencionó que “hay datos que muchas veces se contraponen” porque la llegada al mundo de su hijo sucedió “en el medio una situación compleja en cuanto al dibujo familiar”. “Eso afectó debido a que había que asumir responsabilidades y tomar decisiones”, mencionó.
“Y esas decisiones, muchas veces, se toman sobre algún dato erróneo. Prácticas y aplicaciones que tendrían que haber ido para un lado, fueron para otro. Y, a lo mejor, puede ser que eso haya incidido sobre el diagnóstico posterior de mi hijo. Hubo cosas que se deberían haber hecho y no se hicieron”, reconoció.
Una vida por delante
“Antoñito es un chico lleno de vida. En estado natural él tiene la energía de un chico de ocho años. Pero el tema es cuando él debe enfrentar la bajada eléctrica de la descarga de su cerebro. Por ejemplo, vos lo tenés abrazado, y cuando le da descarga eléctrica lo notas”, mencionó el conductor.
“Él primero vivía en Córdoba, pero después vino acá para tener una conexión mucho más intensa con determinado tipo de profesionales e institutos. Con su nacimiento yo cerré una etapa de mi vida e inicié otra completamente diferente, donde no sabía y tenía que aprender”, cerró Luis Ventura.