Gracias a su reciente participación como coaches e integrantes del jurado en “La voz argentina”, la música de Mau y Ricky logró terminar de llegar a los pocos rincones que aún no habían tenido el gusto de conocerlos. Al día de hoy, podemos arriesgarnos a afirmar que su fama trascendió por completo.
Al tratarse de los hijos de un más que famoso cantante internacional, Mau y Ricky debieron enfrentar todos los obstáculos esperables en su camino al éxito, más allá de los que comúnmente suelen hacer acto de presencia. Tal como pudimos apreciarlo, lograron salir victoriosos.
De Mau y Ricky Montaner hemos estado escuchando bastante últimamente, aunque no todo haya sido en referencia a su trayectoria profesional. Si bien una buena noticia llegó para alegrar a la familia entera, la llegada al mundo del pequeño Apolo, otras más aparecieron para alterar su paz.
Entre fuertes críticas y acusaciones, mayormente derivadas de su paso por el mencionado certamen de talentos, el dúo de reguetón habría decidido hacer caso omiso a sus detractores y continuar con lo que mejor sabe hacer. Después de un tiempo fuera, los hermanos han vuelto con todo.
Así es como podemos ver este regreso triunfal de Mau y Ricky, de la mano del talentoso Alejandro Lerner y su más reciente versión de “No hace falta que lo digas”, uno de sus más grandes éxitos. Para alegría de sus fans, estos artistas decidieron juntarse para crear algo único.
“El maestro Lerner nos invitó a cantar una nueva versión de esa canción junto a él”.
Quienes quieran escuchar de qué se trata lo que los hijos de Ricardo Montaner prepararon, ya pueden hallar el videoclip de este tema en redes sociales. Asimismo, se espera que los cantantes vayan a presentarlo oficialmente el día 13 de noviembre en el Movistar Arena, en el marco de la celebración por los 40 años de trayectoria de Alejandro Lerner.
Una despedida momentánea
Después de haber sido parte de las últimas grabaciones de “La voz argentina”, Mau y Ricky Montaner, junto a Stefi Roitman, Evaluna y Camilo Echeverry, fueron vistos en el Aeropuerto de Ezeiza cuando se disponían a retirarse del país, con destino a Miami.
Mientras atendían los detalles que les quedaban pendientes para abordar finalmente su transporte, los Montaner accedieron, sin problemas, a ser fotografiados por la prensa. Eso sí, sin que pudiéramos ver el rostro de la pequeña Índigo, por las razones que sus padres ya habían dado a conocer.