Tras el rechazo del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) propuesto por el presidente Javier Milei, hay incertidumbre sobre el futuro de los contratos de alquiler en Argentina. El DNU incluía la derogación de la Ley de Alquileres, y su rechazo podría significar la restauración de la ley anterior.
Si el DNU es definitivamente rechazado, los contratos de alquileres firmados bajo las nuevas normativas podrían verse afectados. Sin embargo, según los expertos, los contratos actuales no sufrirán cambios inmediatos, ya que la ley no se aplica de manera retroactiva.
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Esto significa que los contratos firmados desde la entrada en vigor del DNU hasta su posible anulación seguirán siendo válidos bajo los términos establecidos en ese momento. De esta manera, inquilinos y propietarios estarán atentos a lo que sucede en el Congreso en los próximos días.
La Ley de Alquileres, que había sido derogada por el DNU, establecía condiciones como la duración del contrato y los ajustes de precios basados en un índice oficial. En pocas palabras, los contratos se liberaron y en la mayoría de los casos se acoplaron al precio del dólar blue y no con el oficial.
Con el rechazo del DNU, se plantea la posibilidad de que estas condiciones vuelvan a ser aplicables, lo que podría llevar a una disminución de la oferta de alquileres y a un aumento en los precios, afectando tanto a inquilinos como a propietarios.
El mercado inmobiliario había experimentado un incremento en la oferta de propiedades en alquiler tras la derogación de la Ley de Alquileres por el DNU. De esta manera muchos inquilinos se vieron afectados y tuvieron que salir en busca de nuevas ofertas.
Retroceso
Con la posible vuelta de la ley, se teme que la oferta disminuya nuevamente, lo que podría tener un impacto negativo en el acceso a la vivienda. El rechazo al DNU de Milei plantea un escenario de incertidumbre para el mercado de alquileres en Argentina.
Los contratos actuales permanecerán vigentes bajo las condiciones en las que fueron firmados, pero el futuro de los nuevos contratos y las condiciones del mercado dependen de las decisiones legislativas y de si se reintroduce o no la Ley de Alquileres.