Alberto Cormillot asegura que el agotamiento por calor es una condición que se produce cuando el organismo se sobrecalienta debido al contacto con las altas temperaturas, la humedad y el ejercicio físico intenso. Si no se trata a tiempo, puede derivar en un impacto de calor, que es una emergencia médica que coloca en riesgo la vida.
Alberto Cormillot dice que es importante reconocer las señales de agotamiento por calor y actuar de forma rápida y adecuada. El médico especialista en nutrición y salud pública dice que dichas señales de agotamiento por calor pueden variar según la persona.
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Algunas de las señales son: sudoración excesiva, que puede generar deshidratación y pérdida de sales minerales; piel fría, húmeda y pálida, con erizamiento o piel de gallina al estar en el calor; mareos, vértigos, náuseas, dolor de cabeza y debilidad; pulso rápido y débil, presión arterial mínima y dificultad para respirar; confusión, irritabilidad, ansiedad o pérdida de conciencia.
Ante la presencia de estos síntomas, Alberto Cormillot recomienda: interrumpir la actividad física y buscar un lugar fresco y ventilado, preferiblemente a la sombra o con aire acondicionado. Beber agua fría o bebidas isotónicas, que ayudan a reponer los líquidos y los electrolitos perdidos por el sudor. Evitar el alcohol, el café y las bebidas azucaradas, que pueden agravar la deshidratación.
Aplicar compresas frías o hielo en la frente, el cuello, las axilas y las ingles, que son las zonas donde se concentran las principales arterias del organismo y donde se puede mermar la temperatura más rápido. También es importante aflojar o quitar la ropa que pueda impedir la evaporación del sudor y la circulación sanguínea.
El agotamiento por calor es una situación que puede prevenirse y tratarse con facilidad, siempre y cuando se esté atento a las señales que envía el organismo y se sigan las recomendaciones del doctor Cormillot, un experto en el tema.
Si los síntomas no mejoran en una hora o si se presentan signos de impacto de calor, como temperatura corporal superior a 40 °C, piel seca y roja, convulsiones o coma, se debe llamar inmediatamente a los servicios de emergencia.
Cómo prevenir
Para prevenir el agotamiento por calor, Alberto Cormillot aconseja: Evitar (el contacto con el) sol y el calor entre las 10 y las 16 horas, que son las horas de mayor radiación solar. Usar ropa ligera, holgada y de colores claros, que permita la transpiración y refleje el calor. Proteger la cabeza con un sombrero o una gorra y los ojos con gafas de sol.
Hidratarse adecuadamente, bebiendo al menos dos litros de agua al día, más si se realiza actividad física o si se suda mucho. No esperar a tener sed para beber, ya que es un signo tardío de deshidratación. Adaptar el ritmo y la intensidad del ejercicio físico a las condiciones climáticas, evitando las horas más calurosas y los lugares sin ventilación. Hacer pausas frecuentes y refrescarse con agua o con una ducha.