La China Suárez no ha dejado de ser noticia en los últimos días, puesto que su vida sentimental se ha convertido en uno de los temas más interesantes. El romance que tenía con Lauty Gram parece haber llegado a su fin, pero personajes del pasado podrían estar rondando nuevamente su vida.
La China Suárez sorprendió cuando al separarse de RusherKing, se dejó ver con el joven cantante, sin embargo, nunca llegó a blanquear este nuevo romance, a pesar de las miles de pruebas que existieron. Ahora, que todo ha llegado a su fin, un nuevo interés amoroso estaría naciendo.
Te podría interesar
Mucho se habló de que el joven santiagueño podría tener intenciones de retomar su vínculo amoroso con la actriz, ya que se supo que fue él quien habría cortado el romance, pero estaría sumamente arrepentido por tal decisión. Esto fue informado fue Juan Etchegoyen días atrás.
No obstante, según lo que compartió la cuenta de Instagram “Gossipeame”, podría ser otra persona quien esté en el radar de la China, alguien con quien ha sido vinculada antes y no sería del agrado de RusherKing. Así es, Marcos Ginocchio podría ser el galán que habría conquistado a Eugenia.
Como se sabe, tanto el salteño como la ex “Casi Ángeles” trabajan para la misma agencia y luego de haber viajado juntos a México, la buena onda se hizo evidente. Tras este viaje, fueron muchos los seguidores que comenzaron a esperanzarse con estos dos como pareja, cosa que parecía imposible en ese entonces.
No obstante, tal y como lo dijo esta famosa cuenta de Instagram, las visitas y coincidencias entre Marcos y Eugenia no han dejado de sonar, por lo que de ser posible este romance, sería cuestión de tiempo que salieran a la luz las primeras imágenes que los vinculen sentimentalmente.
En el pasado
Recordemos que hace un tiempo, exactamente cuando la China Suárez y RusherKing se separaron, corrió el rumor de que Marcos Ginocchio habría protagonizado un fuerte cruce con Thomás.
Según contaron, el hecho de que el ex “Gran Hermano” haya coqueteado con la China en una fiesta, no le agradó en absoluto a Rusher, quien decidió enfrentarlo en un conocido restaurante de Buenos Aires.