Eva de Dominici es una actriz y modelo argentina que ha logrado trascender las fronteras de su país y consolidarse como una estrella internacional. Su talento, belleza y carisma la han llevado a participar en exitosas producciones de cine y televisión, tanto en Argentina como en Estados Unidos.
Eva de Dominici tiene, detrás de su brillo y glamour, una historia de esfuerzo, superación y humildad, que se remonta a su infancia en Villa Fiorito, el mismo barrio donde nació y creció Diego Maradona. La actriz utilizó sus redes sociales para enseñar la fachada de la vivienda en la que nació.
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Eva nació el 21 de abril de 1995 en Avellaneda, provincia de Buenos Aires, pero pasó gran parte de su niñez en la casa de su abuela materna en Villa Fiorito, un asentamiento precario y marginal, donde la pobreza, la violencia y las dependencias eran moneda corriente.
Allí, Eva convivió con sus primos, tíos y vecinos, y aprendió a valorar las cosas simples de la vida, como jugar en la calle, ir a la verdulería, o nadar en la pileta del club. También desarrolló su pasión por el arte, la música y la actuación, que la acompañaría durante toda su vida.
“En los barrios marginales de Argentina se (halla) la casa donde pasé innumerables horas soñando despierta durante mi infancia. Aunque estoy a kilómetros de distancia, en mi mente lo vuelvo a visitar todo el tiempo”, escribió la artista al hablar del lugar en el que creció.
“La casa de Villa Fiorito, una de las casas que marcó mi infancia. Estoy lejos, pero en mi mente la visito todo el tiempo”, completó Eva al pie de una selección de fotos que retratan su infancia. En las imágenes se puede ver la fachada de la casa, parte del barrio y un carnet.
Cambios
En 2018, Eva decidió mudarse a Los Ángeles, Estados Unidos, para buscar nuevas oportunidades y expandir sus horizontes. Allí conoció al cantante y compositor español Eduardo Cruz, hermano de las actrices Penélope Cruz y Mónica Cruz, con quien inició un vínculo amoroso.
Eva de Dominici es una dama que ha sabido aprovechar las oportunidades que le brindó la vida, sin olvidarse de sus orígenes ni de sus sueños. Su historia es un ejemplo de que, con talento, perseverancia y humildad, se puede llegar lejos y triunfar en el mundo del arte.