El té de lechuga es una bebida natural que se prepara con las hojas y el tallo de la lechuga, una planta comestible que se usa mucho en las ensaladas. Este especial té tiene varias propiedades beneficiosas para la salud, entre las que se destacan las siguientes.
El té de lechuga es un sedante suave y natural, que ayuda a combatir el insomnio, el estrés y la ansiedad. Esta infusión contiene lactucina, una sustancia que actúa sobre el sistema nervioso central y produce un efecto relajante y calmante.
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El té es un diurético que ayuda a eliminar el exceso de líquidos y toxinas del organismo. Así mismo, tiene un alto contenido en agua y potasio, que favorecen la función renal y previenen la retención de líquidos y la formación de cálculos. También es un digestivo, que ayuda a mejorar el tránsito intestinal y a prevenir el estreñimiento.
El té de lechuga tiene un alto contenido en fibra, que estimula el movimiento de los intestinos y facilita la evacuación. Además, tiene un efecto antiinflamatorio, que alivia los cólicos y las flatulencias. Es un antioxidante, que ayuda a retrasar el envejecimiento celular y a prevenir enfermedades degenerativas.
El té de lechuga contiene flavonoides, que son unos compuestos que protegen a las células del daño causado por los radicales libres. Los flavonoides también tienen un efecto antiinflamatorio, antialérgico y anticancerígeno. Para prepararlo se necesitan 4 hojas de lechuga fresca y lavada; 1 litro de agua y miel o azúcar al gusto (opcional).
El procedimiento es el siguiente: Cortar las hojas de lechuga en trozos pequeños y colocarlas en una olla con el agua. Llevar la olla a ebullición y dejar hervir durante 10 minutos a temperatura mínima. Apagar la hornalla y dejar reposar el té durante otros 10 minutos. Colarlo y endulzarlo si se quiere. Servir el té caliente o frío, según el gusto.
Atención
El té de lechuga se puede tomar a cualquier hora del día, pero se recomienda especialmente tomarlo antes de dormir, para aprovechar sus efectos sedantes y facilitar el descanso. También se puede tomar entre las comidas, para saciar el apetito y evitar el picoteo.
No se recomienda tomar más de tres tazas de té de lechuga al día, ya que puede causar somnolencia, hipotensión o alergia en algunas personas. Antes de ingerir el té de lechuga se debe consultar con el médico si se tiene alguna condición médica o se está tomando algún medicamento.