Los perros son animales muy valorados en el ámbito de la familia y los hogares, pues son amigables, leales y muy compañeros. Su capacidad para entender el lenguaje humano ha sido bastante cuestionada durante muchos años, pues hay personas que consideran que pueden hablarles y que estos pueden entender.
El debate sobre si los perros entienden lo que se les dice ha llegado a su fin, cuando una alta casa de estudios llevó adelante una investigación para determinar el alcance de las palabras y los comandos a los canes. En este sentido, surgieron varias sorpresas entre propios y extraños.
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De acuerdo a la Universidad de Dalhousie en Canadá, los canes pueden entender hasta 89 palabras, en general, pero algunas razas pueden llegar a entender hasta 200. El estudio se basó en encuestas a los dueños de más de 160 perros en los que se analizó la raza, la edad, el tipo de entrenamiento que tenían, etc.
No obstante, el estudio indica que hay una decena de palabras que los canes pueden identificar con mayor rapidez que otras. Estas tienen que ver con vocabulario que escuchan casi constantemente por parte de sus propietarios y que forman parte de la vida cotidiana.
Las palabras que mayormente entienden los perros son: pelota, sentado, ven, quieto, dormir, espera, no, comida y bueno. La mayoría de estas palabras forman parte del léxico que escuchan frecuentemente por parte de sus propietarios y en entornos familiares.
Aunque los estudios son bastante concluyentes, hay personas que manifiestan que pueden comunicarse con sus perros de manera mucho más fluida y compleja. Esto podría deberse al entrenamiento que tienen las mascotas y no a una regla más o menos generalizada.
Otras ideas
Los perros son considerados de los animales más inteligentes del mundo animal, pero todo depende de varios factores ambientales e internos. La raza influye, pero también el entrenamiento, pues su cerebro obedece a la acción y reacción para proceder.
Como muchos saben, los animales reaccionan a estímulos para una determinada reacción, lo que explica que, ante el sonido de su plato de comida o una bolsa de alimento, estén mucho más atentos que en otras circunstancias. Es importante tener información confiable para saber cómo se comportan y brindarles mayores comodidades.