El relator, periodista, columnista y conductor de radio y televisión, Alejandro Fantino, que espera volver a la pantalla chica lo más antes posible, en este caso a Canal 9, contó hace un tiempo su original método que tiene para despertarse todas las mañanas: su mascota, que duerme en la misma habitación que él, le habla.
Alejandro Fantino, quien siempre se destacó en su trabajo en el epílogo de cada jornada, está acostumbrado a despertarse tarde y con esos nos referimos a alguien que no tiene el despertador activado a las 7 de la mañana o antes. En el caso de pasarse de sueño, el periodista tiene a su mascota para que lo salve.
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"Me levanto 9:30, 9:45, con una alarma de El bueno, el malo y el feo (el clásico spaghetti western). Tardo unos 15 o 20 minutos en salir de la cama. Y tengo una lora, una lorita amazona, que duerme en un palito, al lado de la cama”, contó Ale hace un tiempo en el programa “Paren la Mano”, de radio Vorterix.
“Y ahora (conocí) que, si le dejo un poquito (desplegada) la cortina, le empieza a (dar) el sol en los ojos y biológicamente empieza a hablar. Y empieza: hola, hola, hola, mamita”, manifestó Fantino sobre el peculiar despertador parlanchín que tiene colgado en una esquina de la habitación.
"A El bueno, el malo y el feo vos le clavás un posponer, pero la lora no pospone", aclaró el exconductor de “Animales Sueltos”, quien debió acostumbrarse a las palabras de la lora ni bien el sol toma protagonismo en la habitación que duerme junto a su esposa Constanza Mosqueira.
¿De dónde viene Lolita? Si bien tiene una alta preferencia por los perros, Alejandro Fantino también quiso un loro como mascota. Según sus propias palabras, ni bien la vio, quedó flechado, no dudó dos veces en “comprarla” y llevarla a su casa de Nordelta en Buenos Aires.
Buena compañía
El santafesino aseguró que su mascota la adquirió hace varios años, en Corrientes, de manera legal. "La compré con papeles, es de criadero. A esa especie, en un momento, la habían declarado plaga, entonces las eliminaban, pobrecitas”, narró escudándose que no compró un animal en peligro de extinción.
“Hacían nacer algunos especímenes en criaderos. Compré una de criadero, con los papeles, el anillito, todo. Los loros viven 90, 95 años", aseguró Alejandro Fantino dejando en claro que, si todo marcha bien, la mascota estará hasta el fin de sus existencias.
Los loros son animales muy inteligentes e hipersensibles, emocional y físicamente. El manejo inadecuado puede enseñarle a un loro que ya es temeroso o agresivo, o incluso a un loro manso y cariñoso, a morder y volverse agresivo. Esto no sólo puede causar al loro graves problemas psicológicos relacionados con el estrés, sino que también puede afectar drásticamente su salud física.
El pico de los loros está diseñado para masticar constantemente, cómo construir nidos, romper nueces, buscar comida y masticar ramas. Sus picos también pueden ser peligrosos y causar graves lesiones a los humanos. Esto lo hacen de alguna manera, una mascota exclusiva, en donde solo el dueño puede intervenir.