Sábado 11 de Mayo 2024
ACTIVIDAD FÍSICA

Cómo aumentar la actividad física en primavera, con cuidado

Actividad física y primavera, una buena combinación.  

Escrito en ENTRETENIMIENTO el

Con la llegada de los primeros días soleados y cálidos de la primavera, parece que nos sentimos inspirados a cambiar el modo con el cual encaramos la actividad física diaria. El cambio de estaciones también supone cambios significativos en nuestra vida cotidiana, que muchas veces viene marcada por la sensación de que tenemos menos energía de lo habitual.

Si sientes que te ha golpeado el cansancio primaveral y quieres superarlo, recuerda que la solución es bastante sencilla: así como el apetito crece a medida que comes, ¡la energía se genera al hacer algo! Entonces: ¿De qué manera vas a encarar la actividad física en esta nueva estación?

Es cierto que la primavera tiene alguna capacidad especial para afectarnos física y emocionalmente. Expertos en acondicionamiento físico aseguran que se trata de un fenómeno natural determinado por la adaptación de uno a una rutina diaria diferente.

En los días soleados de verano, la asistencia al entrenamiento disminuye. En otoño, algunas personas regresan, pero no siempre con una regularidad estable. El rápido aumento de la actividad física se puede observar durante los primeros meses de primavera.

Una respuesta lógica a este comportamiento es que todos o la gran mayoría saben que para llegar bien al verano debe aprovechar muy bien la primavera, única estación que resta antes de ingresar al periodo estival, que significa más calor y vacaciones.

Así, después de varios meses de llevar una vida relativamente pasiva, nos apresuramos a compensar la inactividad pasada. Los entrenamientos son fuertes y, si el físico no está preparado para el esfuerzo, una dosis desproporcionada y una buena determinación pueden generar una fatiga aún más grave.

Consejos

La causa de la fatiga puede estar asociada con un rápido aumento del esfuerzo físico tanto durante el entrenamiento como en la vida cotidiana. Para que el ejercicio y un estilo de vida activo te proporcionen la sensación de bienestar deseada, deben convertirse en un hábito constante.

 El término estilo de vida implica regularidad y no debe ser un impulso estacional. De esta manera, se debe aumentar la actividad física de manera progresiva, no todo de un día para el otro y con el cuidado de un entrenador. Él sabrá tu real condición atlética y te guiará por el camino menos frustrante.