Si alguna vez has visto una foto de Flor Vigna y sus abdominales marcados, no te sorprenderá saber que la artista de 29 años tiene un régimen de dieta y ejercicio extremadamente disciplinado. Sí, la joven comenzó con una rutina de ejercicios cuando notó que le faltaba el aire en sus shows.
Flor Vigna, quien participa de la nueva edición del “Bailando 2023”, se ha ganado cada uno de sus músculos gracias al sudor y la gran voluntad. Quizás toda esa disciplina y tonificación se debe a Luciano Castro, quien se comprometió a realizar la rutina de ejercicios de su pareja cuando notó el problema.
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Aunque nos gustaría poder decirte "¡Es fácil! ¡Cualquier chica puede hacerlo!" o "¡Este pequeño truco te permitirá conseguir los bíceps levantados de Flor en segundos!", Después de un vistazo de una de sus clases muchos quedarán sorprendidos con la rudeza que entrena.
Con las imágenes quedó claro que la intensidad de Vigna no se puede duplicar fácilmente. Sin embargo, sus movimientos y sus trucos dietéticos (en donde los carbohidratos y los azúcares están desaparecidos) se pueden seguir si tiene el mismo compromiso de mejorar a cada instante.
Esto es lo que implica la rutina de ejercicios de la actriz. Un día se dio cuenta que no terminaba los shows como ella quería. La falta de aire, por todas las acrobacias y coreos que realiza, le impedía entonar las últimas canciones como se lo había planteado. Es por eso que se propuso entrenar.
Como una verdadera atleta que se prepara antes del gran día, a Flor, que se halla en medio de la primera ronda del “Bailando 2023”, que inició hace un par de semanas, le gusta hacer una rutina de ejercicio acompañada de su novio, Luciano, quien está junto a ella desde hace dos años.
Comprometida
Sus actuaciones, por supuesto, completas con bailes llenos de ejercicios cardiovasculares que harían sonrojar incluso al instructor de Zumba más avanzado, cuentan con otro entrenamiento intenso. Sí bien no es una rutina de ejercicios, Flor Vigna sabe que tiene el mismo desgaste.
“Un día dije que me quedaba sin aire en el escenario. Mis primeros shows cantando, bailando y haciendo trucos me pedían un entrenamiento aún más fuerte que las clases y los ensayos diarios. Así que ahí levantó la mano él (por Castro) .Motivándome a las 8 am para entrenar mi mejor versión”, contó la artista.