La novela protagonizada por Caner Cindoruk y Cansu Dere, “Traicionada”, que se estrenó el lunes pasado en la pantalla de Telefe, es un drama psicológico que cuesta principalmente en sus 31 capítulos la infidelidad de un matrimonio y las consecuencias que derivan de él.
Sí, “Traicionada” es la historia de un romance algo morboso, que tuvo que pagar sus consecuencias en Turquía, país en donde se filmó no solo la primera temporada, sino también la segunda, la cual mantuvo la audiencia en niveles muy alto durante el 2020 y el 2021.
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La primera temporada de la novela cuenta con 31 episodios, cada uno de ellos de más de una hora y media de duración. En Turquía se estrenó el 7 de octubre de 2020 y terminó su primera temporada el 2 de junio de 2021. En todo ese tiempo existieron muchos reclamos en cuanto a la trama.
En aquellos años, el Consejo Supremo de Radio y Televisión de Turquía multó a la novela por considerar “hiriente” y falta de “sensibilidad” en su guión. Sí, “Traicionada” estaba faltando de alguna manera a la moral de la sociedad otomana, que no dudó en hablar del guión.
En una entrevista con un medio español, primer país en comprar los derechos de la ficción, Cansu Dere contó cuál era el objetivo de la novela. “Estamos tocando los corazones de muchas partes del mundo porque contamos una historia universal. Es un sentimiento común, global”, dijo.
Sobre el éxito que generó a nivel mundial, la actriz comentó: “Sin presión. Es algo que me enorgullece de lo que estoy haciendo. Eso me hace muy feliz. En mis proyectos anteriores habíamos tenido mucho éxito en Latinoamérica”.
Falta de moral
En cuanto a la sanción de la corte de Turquía, la protagonista principal de “Traicionada” comentó: “Es un tema muy (prolongado) de contar. Límites de (veto) en cualquier ámbito. Hay reglas que tengo que cumplir debido al país en el que estoy viviendo. Obviamente hay limitaciones en nuestro trabajo”.
“Hay reglas que tenemos que cumplir debido a las condiciones del país donde vivimos. No es muy bueno tener tantas limitaciones, pero hay que cumplirlas. Debo señalar que la ley turca impone más limitaciones a los canales de aire que a los canales de pago, donde no hay (veto)”, aclaró.