Alberto Cormillot recordó, en un nuevo posteo que dejó en su cuenta de Instagram, cómo acompañó a su hija, Reneé, en dos oportunidades, a superar sus problemas con la obesidad. “No siempre podemos solucionar las cosas”, puntualizó el médico nutricionista.
Como lo viene haciendo desde hace mucho tiempo, Alberto Cormillot sorprendió con una nueva reflexión en cuanto a los problemas alimenticios que puede sufrir una persona. En esta nueva oportunidad, en médico contó cómo se puede acompañar a un ser querido.
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En el video, el flamante esposo de Estefanía Pasquini se pregunta: “¿Cómo ayudar a un familiar con sobrepeso?”. Comenzando desde ese interrogante, el reconocido nutricionista le dio un importante mensaje a sus seguidores desde la propia experiencia que vivió con su hija.
“Cuando mi hija tenía 15 años empezó a engordar y yo hice todo lo posible para que adelgazara, con lo cual fui muy eficiente en lograr levantar un muro fenomenal entre ella y yo”, comenzó diciendo Alberto sobre la primera recaída que sufrió Reneé.
“Yo le decía que estaba un poco hipertensa y que le (colocaba) mucha sal a la comida. Le decía: mi amor, ¿le podés (colocar) un poquito menos de sal? Le hablaba cuando estaba comiendo y le agarraba el salero porque ella dejaba caer la sal como si fuera nieve”, recordó.
“Recuerden, no siempre podemos solucionar las cosas pero siempre las podemos empeorar”.
“Después de cinco años de tener éxito absoluto en el fracaso paré, a los 20 años, y ella siguió con sobrepeso de los 20 a los 25 y bueno, en ese momento tomó la decisión, adelgazó y se mantuvo muchos años”, destacó Cormillot sobre los problemas con la obesidad.
Reflexión
“No procures imponerle (a la persona que sufre obesidad) porque no vas a lograr algo en absoluto. La dejé y finalmente ella tomó la decisión: se operó y se está manteniendo, pero siempre supo que podía tener mi ayuda y que yo le iba a dar siempre una mano, pero no que se la iba a (colocar) encima”, destacó Alberto Cormillot.
“Si tienen un familiar con sobrepeso o con alcoholismo pidan ayuda en algún grupo, déjense ayudar, pero no intenten hacer el tratamiento casero, culpabilizarlo o retarlo o mirarlo mal cuando va a comer algo porque con eso, lo único que van a hacer, va a ser empeorar el problema”, completó.