Viernes 26 de Abril 2024
CARAMELITO CARRIZO

La triste e inesperada confesión Caramelito Carrizo

La palabra de Caramelito Carrizo

Escrito en ENTRETENIMIENTO el

Sin lugar a dudas, los últimos años no fueron fáciles para Caramelito Carrizo. La actriz, quien lleva seis meses separada del padre de sus hijos, todavía no asume el fallecimiento de su hermano Martin, quien en sus últimos meses de vida le peleo a una complicada enfermedad.

Sobre las fuerzas que tuvo para acompañar a su hermano, Caramelito Carrizo mencionó: “Fueron 6 años, fue un camino muy fuerte, triste e inesperado. Pero forma parte de nuestra vida, de lo que somos. Es como que hay una mala prensa de lo que significa fallecer, de lo que representa la enfermedad”.

“Por supuesto que lo último que hubiese querido era que él se enfermara, pero cuando pasó, pensé: Bueno, ¿cómo transformamos esto tan espantoso en algo que nos haga (percibir) bien, en algo lindo?. ¿Estás loca? ¿Cómo él se va a (percibir) bien en ese lugar en el que está?, me decían”, contó la exmodelo.

Bueno, te aseguro que mi único objetivo era que él se (percibiera) bien y que estuviera contento, y lograrlo de la forma que sea. ¿Sabés lo que era para mí verlo reírse a carcajadas o que me hiciera los chistes como los hacía hasta último momento o que se enojara bravísimo conmigo?”, agregó.

Sobre los últimos meses de vida de Martin, la bailarina recuerda: “Yo agradecía que conserve la dignidad, su lucidez y su autoridad sobre él mismo, mientras atravesaba una enfermedad donde te quitan todo. Él era una persona tan hermosa, tan motivadora.

“Es re loco, porque una de sus características más notables era esa: lo motivador que era para el resto. Motivaba desde la palabra, desde el abrazo, desde la sonrisa y desde el ejemplo. Vos lo veías y decías: Wow. Cómo es que hizo esto de esta manera”, sentenció.

La familia

Caramelito Carrizo asegura que no solo acompañó a su hermano, sino también a su madre y sobrinos. “Para ellos fue muy fuerte y sigue siendo: perder al papá, sufrir la enfermedad. Son 3: Benja, de 20, Mile, de 17 y Miranda, de 10. Son muy unidos con los míos”, declaró

“Se quieren, se escuchan y se buscan y eso que viven lejos. El nido de (reencuentro) es la casa de la abuela. Pero, en realidad, el que marcaba la línea, el riel, por dónde ir era él. Lo que siento desde mi lugar de tía es que la firmeza con la que los llevó de la mano, de manera metafórica, lamentablemente, hasta su último instante terminó de (enseñar) el padre que era”, completó.