El remake de la telenovela “Pantanal” finalizó el viernes, emocionando al país y dando de qué hablar en las redes sociales. A continuación, algunos de los momentos más destacados del final de la novela de Benedito Ruy Barbosa, proyectada en 1990 y adaptada con éxito por su nieto Bruno Luperi.
“Pantanal” terminó con un texto escrito y recitado por Benedito Ruy Barbosa, autor de la trama transmitida por TV Manchete, en 1990, en clara alusión a los recuerdos de Bruno de la historia original, que tuvo tanta repercusión como la actual versión.
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“El hombre es el único animal que escupe en el agua que bebe. El hombre es el único animal que (ultima) para no comer. El hombre es el único animal que tala el árbol que le da sombra y fruto. Por lo tanto, se está condenando a sí mismo a fallecer”, es el texto que repasó Benedito.
Uno de los momentos más fuertes de la telenovela pasó sin palabras. Luego de sufrir un infarto, Zé Leoncio (Marcos Palmeira) pierde la vida y el ataúd con su cadáver es llevado en chalana. Frente al barco, sus tres hijos, Joventino, José Lucas y Tadeu tocan los cuernos. A lo lejos, Velho do Rio, respondió al lamento.
Durante la fiesta de bodas que cerró la trama, Maria Bruaca y el peón Alcides regresan a la hacienda de Zé Leoncio después de haber huido porque él había terminado con la vida de Tenório, quien era el villano más temible de “Pantanal”.
El Viejo de Río (Osmar Prado) desapareció en el río que sirvió de escenario a casi todas sus escenas en la telenovela. Se fue a bucear y su ropa siguió el curso de las aguas, reforzando el carácter de realismo fantástico que portaba el personaje tanto en la trama original como en el remake.
Último adiós
El diálogo entre él y su hijo José Leoncio conmovió a los internautas. Sí, pese a que no había ningún indicio de su complicada salud, Zé Lencio sufre un infarto, fallece y finalmente halla al padre que buscaba a través de la trama.
La escena que reunió a los actores Marcos Palmeira y Osmar Prado recibió elogios de los fanáticos. Después de decir que está cansado, le pasa la batuta a su hijo, que se convierte en el "nuevo" Velho do Rio de “Pantanal”, recogiendo las prendas que pertenecieron a su padre en el río.