La menopausia es una etapa importante en la vida. Marca el momento en que terminan los ciclos menstruales y da fin a la capacidad de reproducción. Entendiendo esto, Estefanía Pasquini habla de su influencia en el aumento de peso, que cada vez es más notorio.
Estefanía Pasquini les contó a sus seguidores, a través de una nueva publicación, que esta etapa trae consigo múltiples cambios físicos, psicológicos y hormonales en el organismo. Un problema común es la tendencia a la obesidad o al aumento de peso durante y después de la menopausia.
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Según la esposa de Alberto Cormillot, que por primera vez habla del tema, la menopausia suele comenzar entre los 45 y 55 años. Dejan de menstruar debido a la pérdida de la función folicular ovárica, lo que significa que los ovarios dejan de liberar óvulos para la fertilización.
En este periodo, todas pueden tener tendencia a aumentar de peso o experimentar obesidad. Esto puede ser visible a través del aumento de la acumulación de grasa abdominal. Pero ¿cuáles son las razones que impulsan este aumento de peso? Pasquini explica algunas de las causas básicas.
“El aumento de peso se debe a los cambios hormonales”, asegura Estefanía Pasquni. A medida que los niveles de estrógeno disminuyen durante la menopausia, el organismo redistribuye la grasa de las caderas y los muslos hacia el abdomen.
A medida que todas se acercan a la menopausia, a menudo hay una pérdida de masa muscular, lo que puede resultar en una disminución de la tasa metabólica general. Esta disminución en la tasa metabólica significa que el organismo quema menos calorías durante las actividades diarias.
Etapa determinante
De esta manera, Estefanía Pasquini asegura que los cambios hormonales y la pérdida de masa muscular son dos puntos determinantes que facilita la acumulación de grasa y por lo consiguiente un aumento de peso desmedido, esté o no haciendo dieta.
El aumento de peso durante la menopausia también se puede atribuir a factores de la forma de vida, como la disminución de la actividad física, malas elecciones dietéticas y niveles elevados de estrés. Muchas pueden percibir cambios en el apetito, antojos y señales de hambre.