Emilio Cormillot, el pequeño hijo de 18 meses de Estefanía Pasquini y Alberto Cormillot, es un verdadero niño prodigio. Pese a su corta edad, el chiquito aprende chino, considerado uno de los idiomas del futuro detrás del inglés, el cual es predominante en gran parte del mundo.
Sí, la idea de que Emilio Cormillot aprenda chino fue un detalle familiar que sorprendió más de la cuanta. El hijo de Estefanía Pasquini y Alberto Cormillot tiene una profesora particular, que se presentó en la casa de los reconocidos médicos cuando el pequeño cumplió 8 meses de vida.
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“Es una genia, que le habla, le canta y le juega en chino. Siento que es el idioma del futuro, quiero que de chiquito vaya acostumbrando el oído y le sea útil para aprenderlo mejor cuando crezca”, dijo el especialista en obesidad sobre la profesora que va dos veces por semana.
"La profe viene a nuestra casa y no sabés cómo se divierte Emilio con ella. La idea es que retenga los sonidos chinos. No sé si hablará en chino en un futuro, pero al menos así lo puede ir incorporando", aclaró la esposa de Estefania Pasquini.
Estefanía, quien cumplió el sueño de convertirse en madre después de los 30 tras varias pruebas fallidas, está igual de emocionada que Emilio por todo lo que sucede a su alrededor. Casi siempre cuenta su día a día con el niño en sus redes sociales, donde posee miles de seguidores.
“Todo lo divierte, se vive riendo de todo. Cuando canta con nosotros, en el jardín, con sus abuelos y cuando Alberto baila tap él se mueve a su lado. Le fascina. Sólo se molesta cuando quiere agarrar algo y no puede o pasar por un lugar y no cabe. No tiene tolerancia a la frustración”, aclara.
Primero la salud
Emilio Cormillot tiene la ventaja de ser hijo de dos reconocidos médicos, pero eso no lo asegura de estar exento de la enfermedad propia del crecimiento. “Me pongo mal si veo que no está bien o tiene fiebre o síntomas que son propios del crecimiento”, dice Alberto Cormillot.
“Pero en general es un nene feliz. Siempre está contento, de buen humor y riéndose. Cuando lo visto y le pongo un brazo ofrece el otro. Si le lavás una mano pone la otra para que se la lavemos. Es un amor.”, completó la esposa de Estefania Pasquini.