El heredero de Alberto Cormillot confirmó que su progenitor sumó a su hija Abril a su clínica, lo que permite que convivan allí tres generaciones de la familia.
Alberto Cormillot es uno de los médicos más queridos del país y su hijo Adrián develó una historia sobre su padre que conmovió a todos.
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La joven de 23 años se recibió en la misma carrera que su papá y su abuelo, licenciatura en nutrición, y está comenzando su trabajo en la clínica Alberto Cormillot.
Adrián Cormillot escribió: "Haciendo sus primeros pasos en la clínica que fundó mi padre hace más de 60 años. Mi padre y yo empezamos desde abajo. Al igual que su padre y su abuelo, empezaron de abajo".
Y agregó: "Mi viejo por necesidad y nosotros, independientemente de las comodidades que brinda una empresa familiar, nuestros inicios comprendieron y comprenden hacer las tareas más elementales y quizás, las más importantes de internación".
Adrián luego habló de su hija: "Además de capacitarse para ser la mejor del mundo mundial junto a todo el equipo de la clínica, con el paso del tiempo Abril va a saber valorar la experiencia de compartir la diaria junto a personas que (pelean) por recuperarse".
La confesión de Alberto Cormillot
El profesional de la nutrición confesó: "Me hacen falta muchos años más para seguir aprendiendo, enseñando y criando a Emilio, mi hijo más chico".
El médico remarcó que se siente joven a los 83 años: "El viejismo es una serie de actitudes, pensamientos y conductas que hay estereotipadas según las cuales un viejo es una persona descartable, no puede bailar, no puede tener novia y es una carga para la sociedad. No fue cierto casi nunca, pero en los últimos años se duplicó la expectativa de vida, que a principios del siglo XX era de 40 años".