Para el día de los enamorados, celebrado el 14 de febrero, Luis Novaresio sorprendió a sus cientos de miles de seguidores de Instagram con un sutil comentario. “Hagamos de cuenta que no se olfatea el aroma de lo hetero patriarcal, comercial o hegemónico del arbitrario 14 de febrero”, comenzó diciendo.
“Hagamos de cuenta. Sea que, como este día, la vida nos (halle) así, sin necesidad de (desplegar) los ojos todo el tiempo porque uno sabe, percibe, lo que hay, siempre ahí, tan visible. Que la vida sea como hoy nos (halla)”, continúo Luis Novaresio en su publicación dedicada a su esposo.
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“Pares, compartiendo, (aprovechando) de la sensualidad nuestra, imaginando, pero, sobre todo, construyendo paso a paso una realidad que (anhelamos). Que la vida nos (halle) así, (anhelando). Te amo Braulio”, completó el conductor de las mañanas informativas de La Nación.
“Que gente complicada y susceptible son algunos/as, ¿Entenderán de retórica? ¿Metáfora? Etc. Comprensión de texto. Ojalá muchos tengamos la capacidad de abstracción y coherencia que tiene Luis”, escribió una usaría en defensa del periodista que recibió algunas críticas por su publicación.
Hace un tiempo, el rosarino mencionó, en otra publicación en su cuenta de Instagram, qué significa el amor. “El amor es, creo, una decisión de no dejarse arrastrar por las impiadosas consecuencias del azar. Aunque en él haya azar, siempre creo que hay decisión”, dijo.
“El amor, creo, no es el descanso. Porque en él, siempre, creo, está la tensión de los (anhelos). Y el (anhelo), es la falta, y siempre diverso y aun cuando se cree conocido, mutante. Sin embargo, en esa tensión hay, otra vez, la decisión de compartirla, considerar la del otro, sin nunca dejar de ser quienes somos”, aclaró.
El amor es
“El amor es, creo, con un par. El que vale, al reconocer en el otro como un par. Un colega existencial en el que se descansa la angustia de esa misma existencia, aunque sea por un rato. El amor es muy cristalino, creo, en momentos inesperados”, mencionó Luis Novaresio.
“Me despierto en medio de la noche con el mismo temor que tenía cuando era niño. El miedo a no volver a dormir más. Y ese miedo lo tránsito hoy, con amor, aferrándome la mano de quien duerme a mi lado anunciándome que, aunque no vuelva a dormir más, ese amor estará allí, a mi lado”, concluyó.