El árbol de navidad es el símbolo por excelencia de las fiestas de fin de año y su armado, normalmente, se realiza los 8 de diciembre. Sin embargo, pocos saben que el este icono de las festividades tiene que ser desarmado en una fecha específica, culturalmente hablando.
El árbol de navidad es la representación perfecta de lo que simbolizan estas fechas para el mundo cristiano y para los que no. A esta altura del mes, lleva ya casi tres semanas de presencia en los hogares, por lo que le queda un tiempo más en pie antes de ser devuelto a su caja para el año siguiente.
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Confeccionar el arbolito de navidad es una actividad que gusta mucho, tanto a grandes como chicos, pues marca el inicio de una temporada de fin de año que trae grandes recuerdos en los que tienen varios años ya o nuevas experiencias para los más jóvenes. Pero como todo lo que comienza, también debe finalizar.
Existe realmente muy poca gente que sabe a ciencia cierta cuando desarmar el árbol de navidad, debido a que no hay una fecha exacta cada año. No obstante, el acuerdo cultural menciona que este debe desarmarse el primer fin de semana de enero de 2024, lo que es el domingo 7.
A pesar de que la fecha tentativa, se establece conforme a las creencias culturales, lo cierto es que en cada país esto puede variar. En Chile, hay quienes manifiestan que se debe realizar hacia el 2 de febrero, luego del Día de la Candelaria, ya que esa época condice con la presentación de Jesús en el Templo.
Sea cual fuere la fecha, está claro que el árbol de navidad y todo lo que representa está llegando a su fin. En Argentina la fecha tendría vinculación con la festividad de Reyes Magos que está estipulada para el sábado 6 de enero, es decir, un día antes de lo que corresponde.
De opiniones y costumbres
La idea de guardar todo lo que tiene que ver con el árbol de navidad ni bien terminen las fiestas de fin de año es algo que depende puramente de las intenciones de cada hogar. Aunque se establece que el primer fin de semana ya debería estar en su correspondiente caja, lo cierto es que esto rara vez se cumple.
Cientos de miles de hogares dejan el arbolito de navidad en su lugar hasta varios meses pasadas las festividades, ya sea por gusto o falta de voluntad para desarmarlo, lo que no representa problema alguno. Hoy en día, la flexibilidad no tiene algo de malo y se puede llevar adelante perfectamente.