La indigestión es una afección muy común, luego de la noche buena de Navidad, pues es el resultado de una ingesta exagerada y una bebida en grandes cantidades. Este cuadro se presenta con dolores estomacales, náuseas y profundo anhelo de apartarse de los alimentos por un tiempo.
La indigestión puede afectar a cientos de miles de personas que han pasado una Navidad bastante abundante en cuanto a su ingesta. Es por esto que te brindaremos algunos consejos para evitar lo peor de los síntomas y que puedas recuperarte lo antes posible para estar perfectamente el día después.
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De acuerdo a la Clínica Mayo de los Estados Unidos, es posible aplicar un tratamiento para esta molestia estomacal, evitando todos aquellos alimentos que propician la afección. Esto incluye comer saludable en raciones pequeñas durante todo el día, evitar la cafeína y algunos analgésicos como las aspirinas o el ibuprofeno.
Por otro lado, hay que evitar los alimentos altos en grasa y los picantes, los ultra procesados, las bebidas gaseosas, el alcohol y evitar fumar. Si el cuadro es ligero, se puede hacer algo de ejercicio de poco impacto para sudar las toxinas presentes en el organismo y recuperarse más rápido.
Otros motivos que ayudan a prolongar los malestares de la indigestión son la ansiedad, el estrés, la angustia o cuadros de depresión. Se recomienda tomar medidas preventivas con profesionales para aplicar tratamientos que puedan ayudar a una mejor calidad de vida.
Como se puede ver, la indigestión no solamente se produce por la ingesta excesiva de comida, sino por cuadros mentales que pueden ser ocasionados, entre otras cosas, por preocupaciones en esta época del año. Se recomienda fuertemente la actividad para liberar al cerebro de presiones mentales innecesarias.
Otras medidas
Para aliviar la indigestión, luego de Navidad, se aconseja fuertemente la ingesta de agua en cantidades necesarias y evitar beber alcohol o cafeína. Esta última puede deberse a la bebida de café, mate o té, por lo que se puede sustituir con un desayuno o tentempié más natural.
El día siguiente se recomienda comer liviano, inclinándose hacia las verduras hervidas, ensaladas de hojas verdes o con agregados de queso. Se recomienda evitar los vinagres o jugos de limón que podrían acentuar el cuadro de indigestión con los ácidos que están presentes en ellos.