La salud puede verse afectada de diferentes maneras durante la vida de una persona y mucho más desde que la presencia de las redes sociales difundió el imaginario de belleza. Son cada vez más los afectados por trastornos alimenticios en busca de alcanzar la satisfacción en el aspecto personal.
La salud de cientos de miles de personas se ha visto trastocada por el ideal de “perfección” que ronda en las plataformas digitales donde la aceptación solamente se define por la belleza imaginaria. Las redes sociales han creado un mal que se ha viralizado a velocidad de vértigo.
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Hace algunos días se celebró a nivel mundial la jornada contra los trastornos de la conducta alimentaria que han sido fogueadas, las últimas décadas por la publicidad y marketing, pero también por las plataformas sociales. Varios especialistas advierten que son cada vez más los casos en los que estas patologías están fuertemente arraigadas.
De acuerdo a la nutricionista Jesica Lavia, egresada de la prestigiosa Universidad de Buenos Aires, “la insatisfacción con la imagen personal es un factor que determina y mantiene los trastornos de la conducta alimentaria”. Esta situación se ve acentuada por el ideal de perfección presente en el mundo digital.
Por otro lado, se sabe que la delgadez es bien percibida en el mundo de las redes sociales, siendo su contraparte, completamente castigada por cientos y miles de ciberusuarios. Aunque la sociedad está dando pasos hacia la aceptación de la fisonomía diferente, lo cierto es que todavía falta mucho para que sea una realidad al ciento por ciento.
Los trastornos de alimentación son considerados afecciones mentales que privan de buena salud a quienes los padecen y pueden ser vistos en niveles realmente graves. Es por eso que la concientización sobre estos temas es fundamental, especialmente desde el hogar, pero también desde la escuela y la sociedad en general.
Lo concreto y lo mental
Las redes sociales han sido probadas de contribuir a generar una imagen distorsionada de las personas, colaborando para afectar la salud de manera negativa. Es por eso que es tan relevante concientizar a los usuarios de plataformas digitales que mucho del contenido que se ve no es real.
Por otro lado, reflexionar sobre la aceptación de la fisonomía diferente es un trabajo que debe ser realizado de manera conjunta por el aparato estatal, pero también del sector privado. Es importante destacar el rol de los medios en el marketing como vehículo reparador del daño ocasionado desde hace varias décadas.