Caminar es una de las acciones propias del ser humano, desde poco después de nacer y durante toda su vida. Sin embargo, la vida y responsabilidades modernas ocupan gran parte del tiempo de las personas y, en gran cantidad de ocasiones, les impiden realizar esa sencilla y natural actividad, afectando negativamente su salud.
Caminar es una acción que cada vez se realiza menos, no solo por los tiempos y trabajos modernos que implican que uno esté siempre frente a las pantallas, sino porque los medios de transporte son cada vez más cómodos y rápidos. A pesar de esto, se conocen perfectamente los beneficios para la salud del desplazamiento a pie.
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Según varios estudios, la caminata es una acción que posibilita el incremento de la resistencia y ayuda a reducir el cansancio general. No solo fortalece el tren inferior, sino que tonifica los músculos de estas extremidades y los pies. Se puede complementar con algunos ejercicios extra para mayor impacto.
Por otro lado, la marcha a paso ligero tiene excelentes beneficios para la salud mental, pues es sabido que puede ayudar a liberar los cuadros de estrés, insomnio, depresión y otras afecciones mentales. Es interesante destacar que no se requiere equipamiento especial y solamente una rutina marcada.
Otro de los grandes impactos positivos de la caminata es que, una vez se ha ganado la resistencia, se puede comenzar a caminar mucho más rápido y con el tiempo se puede subir gradualmente el paso a un pequeño trote, siempre teniendo en cuenta la experiencia y objetivos del actuante.
Se recomienda fuertemente comenzar moderadamente, debido a que se debe establecer el nivel inicial y el alcance de las actividades que se harán. También es necesario llevar adelante un plan de frecuencias para que sean realizadas de manera constante y no abandonar a las primeras de problemas.
Consejos adicionales
Caminar puede ser una excelente opción para aquellos que quieran comenzar a hacer actividades físicas y retribuye fantásticamente en la salud y el humor. Para llevar adelante una actividad a todas luces saludables es importante mantenerse hidratado, antes, durante y después de la rutina.
No es necesario caminar rápido ni demasiado lejos en las primeras instancias, sin embargo, para que el organismo comience a aclimatarse al esfuerzo, es interesante comenzar a aumentar la distancia y solo si es posible, con algo de carga en los tobillos o mochila de peso.