El Ballet Fit es una nueva disciplina que llegó para quedarse, pues ha logrado conquistar a muchas personas del mundo del espectáculo, tales como la actriz Natalie Portman y la cantante Taylor Swift, quien ha comentado, en reiteradas ocasiones, lo mucho que le encanta practicarlo.
El Ballet Fit es una actividad que va más allá de clases de ballet regulares o ejercicios de gimnasio, si no que es ideal para que aquellas personas que busquen también divertirse a la hora de realizar un entrenamiento diario, cuestión que fue el principal atractivo para Taylor Swift.
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Desde hace un tiempo, el Ballet Fit ha comenzado a tener más relevancia en todo el mundo, y es que es una mezcla de dos disciplinas: el Ballet Beautiful y el Ballet Fitness. El primero de este nació en Estados Unidos y fue el que se utilizó en la icónica película “El cisne negro”.
Mientras, el Ballet Fitness tuvo sus orígenes en Brasil de la mano de Betina Dantas, quien tras sufrir una lesión y verse imposibilitada de seguir practicando el baile que era su vida, tomó la determinación de mezclar pasos de ballet con ejercicios funcionales, naciendo así el Ballet Fitnnes.
Sin embargo, no fue hasta que llegó Gloria Morales y fusionó estas dos disciplinas y creó el Ballet Fit, el preferido por Taylor Swift, y sus amigas celebridades, por ser uno de los pocos entrenamientos en los que se obtienen múltiples beneficios, se escucha buena música y la diversión nunca falta.
Además, este ejercicio, que ha conquistado el corazón de Taylor, se basa principalmente en combinar la danza clásica con algunas actividades aeróbicas, las cuales también incluyen actividades de yoga y pilates, por lo que no sorprende que sea uno de los más completos.
Beneficios
Entre los principales beneficios que hallamos en el Ballet Fit, el entrenamiento que elige a diarios Taylor Swift, se hallan la tonificación de los músculos en general, siendo que se trabaja el físico completo, la elasticidad y flexibilidad, gracias a las posturas de yoga y pilates que aplica.
También podemos mencionar la fuerza, tonificación, coordinación y, por supuesto, la amplia variedad de ejercicios cardiovasculares que ayudan a fortalecer el corazón. Como no podía ser de otra manera, la actividad está acompañada de música, la cual puede ir desde lo clásico hasta lo más actual.